Naciones Unidas instó este miércoles a los gobiernos a tomar medidas para poner fin a la mutilación genital femenina, lo que subrayó es una violación de los Derechos Humanos. Además, llamó a evitar que decenas de millones de nenas sean mutiladas de aquí a 2030.
Según la ONU, en la actualidad al menos 200 millones de nenas y mujeres han sufrido la mutilación genital y para evitar que la cifra siga en aumento hicieron un llamado a los gobiernos de los países en los que la práctica está extendida a "elaborar planes de acción nacionales para erradicarla".
Si bien el organismo señaló que la mutilación genital femenina está disminuyendo en muchos países, “si se mantiene en los niveles actuales, el rápido crecimiento de la población en los países donde se da esta práctica, aumentará significativamente el número de nenas mutiladas”.
De hecho, los cálculos que maneja la ONU, publicados en su página web, hablan de que unas 68 millones de nenas que serán sometidas a la mutilación de aquí a 2030.
Junto con otras organizaciones, desde el principal organismo internacional indicaron que la práctica vulnera el derecho de las mujeres a la salud sexual y reproductiva, entre otros derechos.
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También, señalaron que se trata de una "violación de la ética médica", ya que acarrea riesgos: “Las niñas que han sido sometidas a la mutilación genital femenina se enfrentan a complicaciones a corto plazo como dolor agudo, estados traumáticos, hemorragias graves, infecciones y dificultad para orinar, así como consecuencias a largo plazo para su salud sexual y reproductiva y para su salud mental”.
Además recalcaron que los líderes religiosos locales tienen que acabar con el mito de que esta práctica pueden sustentarse en la religión. "Hay que facilitar más información a las personas y familias acerca de los beneficios de abandonar la mutilación genital femenina", aseguraron.
La ONU cuenta con el Fondo de Población y el Fondo para la Infancia con el que lleva a cabo el mayor programa mundial para acelerar la eliminación de esta práctica. “El programa se centra actualmente en 17 países de África y Oriente Medio y es, además, compatible con las iniciativas regionales y globales”, indicaron.
