La comunidad que vive cerca del Lago Alberto, en el noroeste de Uganda, está en alerta. El Gobierno confirmó que un cocodrilo atacó y devoró a una mujer y su bebé, de cinco meses, que se habían acercado a la orilla para buscar agua.
// Una turista francesa fue mordida por un cocodrilo salvaje cuando intentaba sacarse una selfie
El ataque dejó al descubierto un conflicto entre los humanos y animales en África, en donde las especies deben luchar por la falta de recursos naturales y las familias de las zonas rurales más empobrecidas se exponen a lugares peligrosos por la falta de agua corriente en sus casas.
"Estamos aconsejando a la gente que evite las zonas donde se encuentran estos cocodrilos devorahombres", aseguró Bashir Hangi, vocero de Uganda Wildlife Authority, uno de los organismos que regula la conservación de la vida silvestre en el país. El funcionario aclaró que estos animales habitan en zonas de cría de peces, pero cuando se agota el alimento, salen a la superficie y atacan a los humanos.
Según el diario local The Daily Monitor, un grupo de personas intentó rescatar a la mujer y a su bebé, pero no tuvieron éxito. El reptil ya había desaparecido con ambos cuerpos en el agua.
La semana pasada, en la orilla del Lago Victoria, las autoridades capturaron a un cocodrilo de 700 kilos que había matado a cinco personas desde 2013. Y lograron trasladarlo al parque nacional Murchison Falls.
// México: un cocodrilo atacó a un turista mientras orinaba y le arrancó parte de un brazo
Uno de los casos que más resonó en los últimos años fue el de una mujer embarazada, de ocho meses, que fue devorada por un ejemplar que vivía en el Lago Kyoga. La víctima estaba juntando leña en la orilla y fue sorprendida por el animal, que la arrastró hacia el agua.
Al enterarse de lo sucedido, su marido salió de su casa armado con una lanza y, gracias a la ayuda de varios de sus vecinos, encontró al cocodrilo y lo mató.