Los nueve alpinistas de una expedición surcoreana murieron en el monte Gurja de Nepal debido a una fuerte tormenta de nieve que devastó su campamento, una de las peores tragedias del alpinismo en el Himalaya de los últimos años.
Los cuerpos de ocho personas -cuatro surcoreanos y cuatro guías nepalíes- fueron localizados entre los escombros de su campamento por un equipo de rescate la mañana del sábado, pero las difíciles condiciones meteorológicas obstaculizaban las labores de búsqueda.
Un quinto himalayista surcoreano, que inicialmente se había dado por desaparecido, fue finalmente hallado muerto en el campamento base, arrasado por la tormenta, por lo que el balance de muertos ascendió a nueve, según las autoridades.
El grupo estaba esperando desde principios de octubre buenas condiciones climáticas para escalar el pico de Gurja,en la cara sur del Dhaulagiri (la séptima montaña más alta del mundo), a 7.193 metros.
La expedición estaba liderada por el surcoreano Kim Chang-ho, quien en 2013 se convirtió en la persona que más rápido coronó las 14 montañas más altas del mundo sin usar oxígeno extra.
El piloto de helicóptero Siddartha Gurung, uno de los primeros en llegar al campamento base tras la tormenta, describió una escena de caos a la AFP.
"Todo desapareció, todas las carpas volaron. Las víctimas están desperdigadas por todo el lugar", explicó el piloto, que pudo posar su helicóptero un poco más arriba del campamento, pero no logró acercarse a pie.
"Las condiciones son demasiado glaciales como para continuar la búsqueda", añadió.
Wangchu Sherpa, de Trekking Camp Nepal, organizadora de la expedición, dijo que activó la alarma tras 24 horas sin tener noticias del equipo.
"Como no se podía contactar con [los himalayistas] desde ayer, enviamos a gente del pueblo y un helicóptero a buscarlos", explicó.
Este es el accidente más grave desde la avalancha provocada por un temblor de tierra que se cobró la vida de 18 personas en el Everest en 2015. Un año antes, 16 sherpas también murieron por una avalancha en la misma cima.
Miles de alpinistas viajan cada año a Nepal, donde se encuentran ocho de las 14 cimas más altas del mundo, lo que genera una lucrativa industria del turismo que es una fuente de ingresos fundamental para este país pobre.