Siete temporadas, uno de los presupuestos más costosos de la historia y una audiencia que no para de crecer. Game of Thrones, la serie basada en los libros de George R. Martin, se convirtió en uno de los productos más preciados de HBO. Solo en su primer capítulo, emitido en 2011, la producción invirtió 10 millones de dólares. La historia, que cautivó a más de 170 países, tiene como distinción sus insólitas locaciones: desde acantilados solitarios en Islandia, murallas cercanas al mar en Croacia hasta una isla remota en España. Un breve recorrido por los puntos más llamativos de sus escenarios naturales que generaron un boom en el turismo con tours temáticos sobre la serie.
Lago Myvatn, Islandia
Es la locación elegida para representar lo que hay al norte del "Muro". Es el cuarto lago más grande del país y una de las zonas más preciadas por los científicos para estudiar al volcán Hverfjall. Durante las primeras temporadas, fue uno de los puntos que más aparecía en la serie mientras el personaje Jon Snow estaba en la "Guardia de la Noche".
Gracias a Game of Thrones, las agencias de turismo de Islandia ofrecen diversas visitas guiadas que incluyen: conocer los lugares exactos donde se filmaron las escenas de Jon Snow junto a la salvaje Ygritte y los tramos donde aparecieron los "Caminantes Blancos". Estos tours pueden costar hasta 550 euros.
San Juan de Gaztelugatxe, España
Esta isla, que pertenece al País Vasco, cautivó a los espectadores por los 241 escalones que forman un acantilado hasta terminar en una iglesia. En la séptima temporada, este escenario vuelve aparecer para ambientar a "Rocadragón". Para ajustarla a los deseos de los guionistas, utilizaron efectos especiales para crear una puerta gigante junto a dos dragones de piedra.
Los oriundos del lugar resaltan que la isla es más mágica de lo que parece en la serie. La antigua iglesia, que en Game of Thrones fue cambiada por un palacio, se encuentra en la cima de una pequeña península donde su única conexión con la tierra es un extenso camino empinado de escalones. Ese trayecto, por donde apareció el personaje de Khaleesi, llegó a tener más de 400 escalones en la Edad Media.
Dubrovnik, Croacia
Este país balcánico es una de las locaciones favoritas de los directos de Game of Thrones. En especial, porque en una de sus ciudades filmaron las escenas de Desembarco del Rey, donde se ubica el trono de los siete reinos. En el caso histórico de Dubrovnik un recorrido a pie puede costar hasta 60 euros.
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Esta ciudad es conocida como "La Perla del Adriático" y es uno de los puntos medievales más antiguos de Europa que permanece intacto. Gracias a la serie, la costa croata se convirtió en uno de los lugares más buscados por los turistas curiosos. Con una gran influencia italiana y un peso de diseño oriental, Dubrovnik cuenta con una muralla de casi 2 kilómetros de largo y 25 metros de alto.
Montes de Mourne, Irlanda del Norte
Es la zona más alta de Irlanda del Norte y muy popular por su hermosa naturaleza. En su terreno predominan los pastizales, muy utilizados en las vistas panorámicas de la serie cuando se hace referencia al trayecto del "Muro". Además fue uno de los elegidos para ambientar las tierras al norte de "Winterfell", el castillo de la familia Stark.
Este escenario no solo inspiró a los directores de Game of Thrones. También fue una de las locaciones que inspiraron a C. S. Lewis a crear el mundo mágico de Narnia.
Aït Ben Haddou, Marruecos
Esta ciudad "fortificada" es Patrimonio de la Humanidad declarado por la UNESCO desde 1987. Además de aparecer en Game of Thrones, como una de las ciudades con esclavos liberada por Khaleesi, también aquí se filmaron escenas de la película "Gladiador" y "La Momia".
La apariencia exótica y las condiciones meteorológicas al lado de la cordillera del Atlas, convierten a esta ciudad en un lugar de rodaje perfecto. Está situada a 100 kilómetros de Marrakech y se alza en una colina que domina una tierra vasta y seca.
