El Pentágono divulgó detalles, fotos y videos de la incursión de las fuerzas especiales estadounidenses en Siria que terminó con la muerte del líder del grupo Estado Islámico (EI), Abu Bakr al Bagdadi.
En las imágenes, se puede ver cómo las siluetas negras de soldados de las fuerzas especiales estadounidenses que se acercan a pie a un complejo de paredes altas donde estaba escondido Al Bagdadi en la localidad de Barisha, situada a apenas seis kilómetros de la frontera turca, en el noroeste de Siria.
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Poco después, el lugar fue arrasado por un bombardeo, dejando el escondite del terrorista más buscado del mundo como "un estacionamiento lleno de baches", en las palabras del jefe del Comando Central de Estados Unidos, el general del Cuerpo de Marines Kenneth McKenzie.
"Las fuerzas de asalto rodearon estas instalaciones y les pedimos a los que estaban dentro que repetidamente salieran pacíficamente", aseguró McKenzie. Según el general estadounidense, todos los que salieron del edificio fueron detenidos y registrados para ver si tenían armas y, posteriormente, fueron liberados.
Entre los integrantes del grupo que salió al exterior había once menores, explicó Mc Kenzie mientras mostraba los videos.
El jefe del Comando Central de Estados Unidos dijo que durante la redada murieron seis miembros del EI (cuatro mujeres, Al Bagdadi y otro hombre), que estaban dentro del edificio y que suponían una "amenaza" para los militares estadounidenses, y que no obedecieron a las fuerzas especiales que les gritaron en árabe que se rindieran.
Ya dentro del edificio, los militares estadounidenses descubrieron que Al Bagdadi se estaba escondiendo dentro de un túnel.
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"Cuando la captura de las fuerzas especiales estadounidenses era inminente, Al Bagdadi detonó una bomba, matándose a sí mismo y a dos niños pequeños que lo acompañaban", indicó.
Además, el alto oficial informó que un número no determinado de combatientes afines a Bagdadi fueron abatidos en la operación luego de que comenzaran a disparar contra los helicópteros que llevaban a los comandos.
Bagdadi, un iraquí que se cree que tenía alrededor de 48 años, rara vez había sido visto.
Desapareció en 2014 y solo volvió a mostrarse en un video en abril con una barba gris y pelirroja, junto a un rifle de asalto, mientras alentaba a sus seguidores a "vengarse" después de la derrota territorial del grupo en Siria e Irak.
Su muerte ya había sido reportada varias veces y ahora los estadounidenses aseguran que comprobaron su identidad con un test de ADN y luego lanzaron sus restos al mar, como lo había hecho con el cuerpo del jefe de la red Al Qaeda, Osama bin Laden, en 2011.
