El fotógrafo africano Chad Cocking logró capturar con su cámara un momento brutal de la naturaleza. Mientras recorría un parque en Sudáfrica, fue testigo del sorpresivo y devastador ataque de un león a una hiena. Como pocas veces ocurre, pudo registrar la secuencia completa, incluido el instante previo a que el inmenso animal se abalanzara sobre su presa.
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Según informó el Dailymail, Cooking, de 36 años, presenció esta escena en Tanda Tula Safari Camp, en Greater Kruger Park. Allí, fotografió al león de 200 kilos justo cuando saltaba sobre una hiena desprevenida, de apenas 65.
Sin que su presa pudiera evitarlo, el león le mordió el cuello y la tumbó rápidamente en el suelo. Entonces, la afirmó entre sus patas y continuó arpretándola con su mandíbula para sofocarla.
"Tras sofocar a la hiena un par de minutos, el león la dejó semimuerta", contó el fotógrafo. Sin embargo, la presa se encontraba gravemente herida y se desangraba a causa de los profundos cortes en su cuello.
Poco después, un segundo felino de gran porte llegó al lugar y continuó la tarea de su compañero.
Además, Cooking contó que, al momento del ataque, el grupo al que pertenecía la hiena se encontraba en el lugar y buscó una forma de ayudarla. Sin embargo, al descubrir que había otros leones en las cercanías, decidieron abandonarla.
"Los otros miembros del clan se habían reunido para salvar a su miembro, pero pronto se dieron cuenta de que no eran rivales para los leones", contó el fotógrafo, y agregó: "La hiena seguía respirando después de que los depredadores se alejaron, pero yacía allí con la espalda rota y sin posibilidad de recuperación".
De acuerdo con Cocking, que además trabaja como guía del parque, los leones fueron atraídos por el sonido de la lucha previa entre las hienas contra perros salvajes africanos.
"Cuando ellas se dieron cuenta de que los felinos habían llegado, ya era demasiado tarde", manifestó.
