La Comisión de Asuntos Internos del Parlamento británico criticó a la empresa News International, filial del imperio de Murdoch en Reino Unido, por "frustrar deliberadamente" la investigación sobre el escándalo de escuchas realizada en 2005 y 2006. También acusó a jefes de Scotland Yard de haber cometido una "serie de fallos" ya que se abstuvo de examinar una gran cantidad de material que podría haber identificado a otros implicados en el caso, informó The Guardian.
"Hubo una serie de fallos por parte de la Policía Metropolitana, e intentos deliberados de News International por frustrar varias investigaciones", declaró el presidente de la comisión, el laborista Keith Vaz.
Tras interrogar dos ex jefes policiales, el órgano multipartidista consideró que hace falta invertir más recursos para informar a otras víctimas potenciales de las escuchas. La comisión se mostró particularmente crítica con los subcomisarios John Yates y Andy Hayman por su manejo del caso.
Al parecer el informe de 2009, en el que Yates concluye que no hay necesidad de reabrir la investigación, era "muy pobre". En tanto, Hayman, que lideró las pesquisas iniciales, habría mantenido una "actitud de caballero" con sus contactos en News International, lo que hace dudar de la imparcialidad de la Policía en el asunto.
Los diputados también critican a Hayman por "prevaricación deliberada" con el fin de engañar a la comisión en el momento de facilitar las pruebas. Además, pidieron que se investigue el posible cobro de coimas por parte de los agentes, tal y como apuntan algunas informaciones.
Después de retirarse de la Policía, Hayman obtuvo un trabajo como columnista del diario Times, propiedad de News Corp. Yates renunció este lunes, al estimar que no podría permanecer en el cargo entre la "insinuación y la especulación" sobre su conducta.
La Comisión de Asuntos Internos del Parlamento exigió también que el gobierno de David Cameron invierta más fondos para acelerar el progreso de la investigación. Hasta ahora el presupuesto de la investigación ha sido tan limitado que la Policía sólo ha podido ponerse en contacto con una fracción del número total de las víctimas de las escuchas.
La Comisión también pidió que el Comisario de Información reciba autoridad real para tomar medidas ante casos de escuchas ilícitas.
