El príncipe Harry de Inglaterra corrió una prueba atlética a beneficio en Rio de Janeiro, en su segundo día de visita a Brasil, y durante su trayecto fue interrumpido por una manifestación de un grupo de personas que reclamaban por las Islas Malvinas.
Los manifestantes llevaban pancartas con inscripciones en inglés del estilo de "The Malvinas are argentinians" y "No Colonialism". La movida fue organizada por el Centro Brasileño de Solidaridad con los Pueblos y la Lucha por la Paz (Cebrapaz).
El príncipe de 27 años, hijo menor de Carlos y Lady Di, también jugó un partido de rugby en la playa de Flamengo con jóvenes de la escuela Rio-Rugby que viven en la favela de Cantagalo, en Copacabana.
Para cerrar su segundo día en Brasil, Harry tiene previsto visitar una favela del norte de Río de Janeiro, donde la seguridad comenzó a ser reforzada desde temprano en la mañana. Unos 300 efectivos fueron movilizados para la llegada. El príncipe jugará al cricket, recorrerá la zona en un telesférico y se dirigirá a la sede de una entidad que realiza trabajo social.
El domingo jugará un partido de polo a beneficio en el interior del estado de Sao Paulo, auspiciado por una marca de whisky, ante el equipo del polista argentino Ignacio Figueiras.
