Penélope Inks tenía 11 años cuando su mamá Heather se la llevó después de perder su custodia. Desde entonces, un equipo de investigadores privados, de la policía y del FBI, se encargaron de su búsqueda internacional.
Aunque parezca una historia de película, seis años más tarde, la niña fue encontrada en una habitación del Hotel Dayss Inn de la ciudad de Madisonville, en el estado de Kentuky (Estados Unidos). Estaba viva, pero en muy mal estado físico y mental: presentaba un avanzado estado de desnutrición, con apenas 33 kilos de peso.
La niña, ahora de 16 años, había sobrevivido con una dieta a base de gaseosas y caramelos.
La dramática historia empezó en 2014, cuando el padre de Penélope, Kevin Inks, ganó un juicio contra la mamá de la niña y se quedó con la custodia total de su hija. Ante esto, la madre la secuestró y desapareció con la chica hasta esta semana en que fue hallada.
La mujer, llamada Heather Renee Inks, fue detenida por el Departamento de Policía de Madisonville y actualmente se encuentra arrestada en el Departamento de Sheriffs de Madison County. Luego será transferida a la Cárcel del Condado de Galveston, donde estará detenida sin posibilidad de fianza.
“Penélope ya tuvo su primera comida. Aunque al principio fue muy complejo lograr que la nos tuviera confianza: se negaba a comer. Todavía está confundida, no sabe en quién confiar y en quién no", comentó Philip Klein, el investigador que fue contratado por el padre de la menor para dar con el paradero de la menor.
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Y agregó información respecto al estado en el que fue encontrada la joven: "Estaba viviendo a base de gaseosas y golosinas, está desnutrida. Pesa apenas 33 kilos y tiene 16 años".
La joven permanecerá bajo el cuidado del Servicio de Protección al menor hasta que el equipo de médicos le realice los estudios físicos y psicológicos necesarios. Luego, podrá vivir con su padre.
