Tras el esperado traspaso histórico del mando presidencial en Cuba de Raúl Castro a Miguel Díaz-Canel, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, no espera cambios en en la isla y no tiene intención de modificar su política hacia el país caribeño, afirmó el miércoles una vocera de la Casa Blanca.
"La política del presidente Trump de canalizar fondos al pueblo cubano y no a los militares ni a los servicios de seguridad e inteligencia es consistente con los objetivos del pueblo de Cuba", manifestó Helen Aguirre Ferre, asesora especial del mandatario y directora de Medios de la Casa Blanca.
Agregó que "Estados Unidos no tiene ninguna expectativa de que el pueblo cubano vaya a ver mayores libertades bajo el sucesor de Castro elegido a dedo", e indicó que su país mantienen la "solidaridad" con la población isleña "mientras exige elecciones libres y justas, derechos humanos y civiles".
Trump ha revertido parte del acercamiento a Cuba impulsado por su antecesor, Barack Obama, que junto a Raúl Castro retomó las relaciones diplomáticas entre los dos países en 2015, tras más de 50 años de distanciamiento.
Aunque las respectivas embajadas continúan abiertas, el republicano ha endurecido el embargo sobre la isla, limitando los viajes de los estadounidenses y vetando a las empresas que pretendan operar con compañías en manos de las Fuerzas Armadas cubanas, que según expertos en Estados Unidos controlan en torno del 60% de la economía de la isla y el 80% del sector turístico.
La elección de Díaz-Canel
El Parlamento de Cuba propuso el miércoles a Miguel Díaz-Canel como nuevo presidente del país, para suceder a Raúl Castro, según anunció la Comisión Nacional de Candidaturas, que también impulsó como vicepresidente primero a Salvador Valdés Mesa y al histórico comandante de la Revolución Ramiro Valdés como otro de los vicepresidentes.
// Quien es Miguel Díaz-Canel, el futuro presidente de Cuba
Díaz-Canel encabeza la propuesta de la Comisión de Candidaturas Nacional (CCN) para la conformación del máximo órgano de gobierno del país, el Consejo de Estado, una candidatura que fue sometida a votación de la recién constituida Asamblea Nacional (Parlamento), aunque el resultado no se hará público hasta mañana. La fecha es simbólica: corresponde al 57º aniversario de la victoria en Bahía de Cochinos (Playa Girón), cuando fueron derrotadas las tropas anticastristas, preparadas y financiadas por Estados Unidos en 1961.
Sin embargo, dado que la candidatura es única, se da por sentado que Díaz Canel, actual primer vicepresidente de la isla, será el primer presidente del país en no llevar el apellido Castro en más de seis décadas.