El presidente estadounidense, Donald Trump, no pierde oportunidad para opinar sobre los temas más polémicos. Esta vez, se mostró a favor de un fallo judicial en su país que dio la razón a un pastelero que no quiso preparar una torta de bodas para una pareja gay. "¡Gran fallo del Tribunal Supremo para el pastelero!", escribió el mandatario.
// Se negó a hacer una torta de bodas para una pareja gay y la Justicia falló a su favor
El controversial proceso judicial comenzó hace casi 6 años, un 19 de julio de 2012, cuando Charlie Craig y David Mullins demandaron por discriminación a Jack Phillips, pastelero y dueño de un local en Denver, porque se negó a preparar la torta para su boda ya que su fe cristiana se lo impedía. En un primer momento, los tribunales inferiores les dieron la razón a la pareja.
No obstante, el Tribunal Supremo de Estados Unidos falló a favor del pastelero, al considerar que sus derechos religiosos fueron vulnerados. "Crear una tarta de bodas para una pareja del mismo sexo sería el equivalente a participar en una celebración contraria a sus creencias más profundas", señala el documento redactado por el juez conservador Anthony Kennedy.
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A pesar de que a primera impresión puede parecer una caso menor, el proceso tiene grandes implicaciones para la sociedad estadounidense debido a los principios que están en juego: la libertad religiosa, la igualdad sexual y la libertad de expresión protegida por la primera enmienda de la Constitución.