La pelea política entre los legisladores demócratas y el gobierno republicano de Donald Trump tuvo este martes uno de sus capítulos más complicados. Los diputados opositores le trabaron en el Congreso la resolución que firmó el presidente de los Estados Unidos para declarar la emergencia nacional, un vericueto legal que le permitía conseguir fondos para la construcción de un muro en la frontera con México.
La Camara Baja aprobó la iniciativa por 245 votos a favor y 182 en contra. Fue clave la votación de una parte de los republicanos. Trece miembros de esa banca apoyaron el proyecto demócrata, que ahora pasó al Senado. Allí, por la división de fuerzas, la oposición debe conseguir cuatro votos oficialistas para respaldar la idea, ya que están en minoría.
Si no ocurre esto, Trump puede vetarla. En ese caso, vuelve al Congreso pero, en ese debate, se necesitaría el apoyo de los dos tercios de ambas cámaras para concretarse, lo que sería improbable.
"No le daremos a ningún presidente, demócrata o republicano, un cheque en blanco para destruir la Constitución de Estados Unidos", afirmó la presidenta de la Cámara de Representantes, la demócrata Nancy Pelosi, según destacó el diario The Washington Post.
Del lado republicano, el líder de ese espacio, Kevin McCarthy, sostuvo que "hay una emergencia nacional en la frontera sur que los demócratas declararon que no existe".
Trump firmó una declaración de emergencia nacional a mitad de enero. Esa medida extraordinaria que permite a los mandatarios estadounidenses acceder en forma temporal a una "potestad especial" para enfrentar una crisis.
La idea del magnate es conseguir 6.600 millones de dólares reasignados de diferentes partidas que, en la previa, ya fueron aprobadas por el Congreso. Ese dinero se sumaría a los 1.375 dados por el poder legislativo para construir el muro.
