El G20 pasó por la Argentina y dejó tras de sí acuerdos económicos, alianzas políticas y, también, ¡chismes para todos los gustos! Si bien hubo muchos momentos destacados, existió uno que se llevó la atención: la cena de la que participaron todos los mandatarios, en el Teatro Colón 🎭.
Guerra fría entre los mozos
Una veintena de mozos estuvo dedicada a atender a los líderes mundiales. Sin embargo, Vladimir Putin y Donald Trump trajeron a sus propios mozos para que los atendieran 🍶
Scanner para el florero 🌻
El operativo de seguridad para el G20 fue tan minucioso que, minutos antes de que los líderes se sentaran a comer, los escuadrones antibombas 👮 estaban con perros 🐶 debajo de la mesa y pasándole el scanner a los centros de mesa, por miedo a que hubiera explosivos escondidos.
¡Quién rompe el hielo!
La formalidad había invadido la cena. Todos comían y no se animaban a explayar la conversación más allá del protocolo. Sin embargo, hubo una persona que rompió el hielo: Ángela Merkel relató sus peripecias para llegar a la Argentina -se le rompió el avión ✈️- y sus aventuras aéreas motivaron a los líderes a salir de la zona de confort 😂.
La mesa está servida
Lejos de como uno acomoda los cubiertos en su casa, la cena tuvo tal nivel de formalidad que los tenedores y cuchillos fueron distribuidos para que formaran distintas imágenes.
