Siete miembros de los Cascos Blancos, los famosos rescatistas voluntarios de las zonas rebeldes de Siria, fueron abatidos este sábado por desconocidos en uno de sus centros en Sarmin, una ciudad de la provincia de Idlib, indicó la organización.
"Desconocidos irrumpieron en el centro de la Defensa Civil en Sarmin y abrieron fuego matando a siete voluntarios", señaló la organización de rescatistas de la Defensa Civil. "Robaron dos ambulancias, cascos (llevados por los socorristas) y walkies-talkies", añadió. Uno de los vehículos fue luego encontrado quemado en las afueras de la ciudad.
Por el momento, no está claro si el objetivo del crimen era el robo o había un móvil político. Los "cascos blancos" afirmaron en las redes sociales que este ataque, "el más mortífero" que sufrieron sus miembros, no fue cometido por "el régimen de Bashar al Assad, sino por una banda criminal".
"Los siete socorristas fueron abatidos de un disparo en la cabeza", precisó Rami Abdel Rahman, director del Observatorio Sirio de los Derechos Humanos (OSDH). "Sus colegas llegaron por la mañana para tomar el relevo y los encontraron muertos", agregó.
Según militantes, es la primera vez que los Cascos Blancos, muchos de los cuales murieron en bombardeos, son blanco de un ataque de este tipo. Entre las víctimas del ataque estaba el rescatista Abu Kifah, cuya imagen había dado la vuelta al mundo en un video en el que se quebraba tras rescatar a una beba de los escombros de un edificio.
Candidatos al premio Nobel de la Paz en 2016, los Cascos Blancos salieron del anonimato gracias a los videos difundidos en las redes sociales donde se les ve arriesgar sus vidas para extraer a sobrevivientes de entre los escombros de las casas y edificios destrozados por los bombardeos del régimen sirio o su aliado ruso.
