Mientras una periodista hablaba en vivo en un noticiero del canal libanés Al Mayadeen, detrás caían las bombas del ataque de Israel al cuartel sirio en Damasco.
La imagen quedó registrada en el momento exacto en el que el sonido de una de las municiones, seco y violento, interrumpió a la conductora. La periodista se asustó, intentó resguardarse y desapareció de las cámaras.
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El misil lanzado por Israel acababa de impactar contra el cuartel del Estado Mayor de Siria en las afueras de Damasco.
El video rápidamente se viralizó y generó conmoción. Inclusive, poco después fue compartido por el ministro de Defensa israelí, Israel Katz, como prueba de la intervención del país y como mensaje directo al régimen de Damasco.
“Israel no abandonará a los drusos en Siria”, escribió Katz unas horas antes en su cuenta de X. Allí mismo, además, advirtió que las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) intensificarán sus ataques si el régimen no se retira del sur del país.
Todo sucede en medio de un conflicto mayor en la provincia de Sweida. Allí, desde el domingo, hay enfrentamientos entre combatientes drusos y tribus beduinas sunitas, desatados por una cadena de secuestros.
El lunes, Siria anunció su intervención para “restaurar el orden”, pero fue acusado por líderes comunitarios y el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH) de actuar en coordinación con los beduinos, lo que generó más complicaciones en el conflicto.
Según el OSDH, hasta este miércoles al menos 248 personas murieron en Sweida. Entre las víctimas hay 92 drusos, incluidos 28 civiles, de los cuales 21 fueron ejecutados sumariamente por fuerzas del régimen, según la organización. También se reportaron 138 miembros de las fuerzas de seguridad sirias muertos y 18 combatientes beduinos aliados.
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Las FDI afirmaron, además, que monitorean de cerca los acontecimientos y están listas para actuar “frente a cualquier escenario que amenace a la población drusa”.
La agencia oficial de noticias siria SANA informó: “Un número indeterminado de civiles sufrió heridas a causa del ataque”.
Luego de que se conociera la dramática noticia, la Unión Europea pidió el respeto de la soberanía de Siria e instó a “todas las partes” a proteger a los civiles, así como a que se implemente “inmediatamente” un acuerdo del alto al fuego anunciado la víspera por las autoridades sirias. También Francia pidió el fin de los “abusos contra civiles” en Sweida.
Por su parte, Siria prometió investigar los incidentes y “castigar a todos aquellos” que cometan crímenes contra los residentes de Sweida.
