El empresario e influencer Ricardo Godoi, de 46 años, murió en enero cuando se sometió a una anestesia general para hacerse un tatuaje. Tres meses después, se dio a conocer la autopsia, que reveló que el hombre tenía hipertrofia cardíaca, una enfermedad que se caracteriza por el engrosamiento del músculo cardíaco.
Godoi, que tenía 200.000 seguidores en redes, murió el 20 de enero en la localidad brasileña de Itapema. Su cuerpo fue exhumado un día después del entierro porque no había sido sometido a un examen postmortem.
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La causa de la muerte del influencer fue un paro cardiorrespiratorio. El informe de autopsia también menciona el uso de esteroides anabólicos por parte de Godoi.
La investigación policial se centra ahora en el tema de la anestesia general utilizada para el tatuaje. La comisaría de Itapema investiga el caso como presunto homicidio culposo, cuando una persona causa la muerte de otra sin intención de hacerlo.
El dueño del estudio de tatuajes informó a g1 que Godoi murió durante la intubación y la anestesia general, antes de que comenzara el diseño. Según dijo, la intervención se realizó bajo la supervisión de un anestesista, luego de que exámenes confirmaran que el empresario se encontraba en buen estado de salud.
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Desde el centro médico Revitalité, expresaron sus “condolencias a la familia del Sr. Ricardo Godoi”. También indicaron que el procedimiento que resultó en la muerte de Ricardo fue realizado por un “médico privado contratado por el estudio de tatuajes y por el propio fallecido” y que solo alquilaron el quirófano.

El dueño del estudio de tatuajes precisó que enseguida “se llamó a un cardiólogo para tratar de reanimarlo, lamentablemente sin éxito”.
Quién era el influencer Ricardo Godoi
Godoi tenía 46 años, era padre de cuatro hijos, abuelo de una nieta, estaba casado y era dueño de una empresa de autos de lujo.

En sus redes, solía mostrarse al volante o posando al lado de autos de lujo. Uno de sus amigos indicó que el empresario tuvo una exitosa carrera en el rubro y hasta fue elegido mejor vendedor de una marca alemana durante años.
“Fue un gran padre, un esposo ejemplar, desbordaba energía allá donde iba y era muy querido por sus hijos”, aseguró al sitio g1.