Nicolás Maduro volvió a jurar este viernes como presidente de Venezuela, en medio de la tensión con la oposición que denuncia el fraude electoral. La ceremonia fue seguida de cerca por los distintos líderes internacionales, que también fijaron su postura.
Si bien los presidentes de Brasil, Lula da Silva, y de Colombia, Gustavo Petro, no manifestaron un rechazo o apoyo claro al chavismo; otros gobiernos, como Nicaragua, Rusia, China, Cuba e Irán, le presentaron sus felicitaciones.
La oposición, liderada por María Corina Machado y Edmundo González Urrutia, recibió el claro apoyo de Estados Unidos, la Argentina, Uruguay, Chile y Ecuador.
Las elecciones del 28 de julio, en las que el Consejo Nacional Electoral de Venezuela proclamó a Maduro como ganador, aunque no mostró las actas, marcaron el inicio de una disputa por el poder. Corina Machado aseguró que había organizado un operativo para resguardar el material electoral que respaldaba la victoria de González Urrutia con más de siete millones de votos, y más tarde, el Centro Carter avaló esta victoria.
Corea del Norte, Bielorrusia, Turquía, Qatar, Siria, Nicaragua, Rusia, China, Irán, Cuba, Bolivia y Honduras felicitaron a Maduro en esa oportunidad. Brasil, México y Colombia decidieron mantenerse al margen y exigieron la verificación de los resultados, y aunque no reconocieron la victoria del chavismo, enviaron sus representantes a la toma de posesión de este viernes.
Entre los que mostraron su apoyo al mandatario venezolano, solo los jefes de Estado de Nicaragua, Daniel Ortega, y de Cuba, Miguel Díaz-Canel, estuvieron en el acto en la Asamblea Nacional.
González Urrutia es reconocido como presidente electo por Argentina, Chile, Uruguay, Costa Rica, Guatemala, Ecuador, República Dominicana y Estados Unidos. El apoyo de los gobiernos se consolidó en la gira previa al 10 de enero, en la que el líder opositor fue recibido por los mandatarios de la Argentina, Uruguay, Estados Unidos, Panamá y República Dominicana.
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La Unión Europea y España no reconocieron los resultados difundidos por el chavismo. El Parlamento Europeo acordó que los embajadores de los países miembros no asistieran a la ceremonia de este viernes. Además, le entregaron a González Urrutia el premio Sájarov a la libertad de conciencia el 17 de diciembre y, meses antes, lo reconocieron como “presidente legítimo de Venezuela” por una iniciativa de los conservadores.
En el Parlamento español, la oposición conservadora impulsó y consiguió aprobar una propuesta para “defender al pueblo venezolano de Nicolás Maduro”, aunque Pedro Sánchez no reconoció a González Urrutia como presidente electo. A pesar de esto, el gobierno informó el jueves que no envió ningún representante a la toma de posesión de Maduro.
