Un papá encontró a su hija, desaparecida durante casi un mes, luego de recibir un llamado anónimo que le dio pistas sobre dónde podría estar. La chica, una adolescente de 14 años, había sido secuestrada en Patchogue, un barrio de Suffolk, en Nueva York.
Antes de ser encontrada, la última vez que Frank Gervasi vio a su hija fue el 9 de diciembre de 2024. Desde entonces hasta su reencuentro, el 3 de enero de 2025, pasaron 26 días y aseguró que sintió un “verdadero alivio” cuando pudo abrazarla. “Fue un regalo de Dios verla viva en mis brazos. No puedo describir la sensación que tuve cuando la abracé”, dijo a News12.
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“Quiero que sepas que te encontraré”
Un día antes de rescatar a su hija, Gervasi publicó un video en su perfil de Instagram. “Si escuchas este video, quiero que sepas que te amamos, que te extrañamos mucho y queremos que vuelvas a casa”. Y agregó: “Sé que podrías pensar que la situación fue muy lejos como para regresar, o que estarás en serios problemas al volver. Pero te aseguro que estarás bien, que la vida es mejor aquí. Si estás en problemas, encontraremos la manera de sacarte de ahí. Papá te ama. Mantén la frente en alto. Quiero que sepas que te encontraré”.
Para ese entonces, ese mensaje ya formaba parte de una campaña por redes sociales que el papá y la mamá de la adolescente estaban llevando adelante. A través de su perfil en Instagram, el hombre dio reportes acerca de la situación, hizo llamados a sus seguidores para que difundieran la información y lo contactaran directamente si sabían algo.
“¡Mi hija sigue desaparecida! Por favor, reenvíen esto”, escribió en la descripción de una publicación que hizo el 12 de diciembre de 2024, tres días después del secuestro. En ella, además de dejar un teléfono de contacto, también ofreció “una recompensa en efectivo de 10.000 dólares” para cualquier persona que la trajera de vuelta a casa.
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En uno de los videos más recientes, insistió en que las personas compartieran sus publicaciones y citó una anécdota que le ocurrió en una estación de servicio, donde fue reconocido por otra persona. “Así como reconocen mi cara, necesito que reconozcan la de mi hija. Por eso hago esto”. Junto con esta campaña digital, la familia de la adolescente también elaboró y pegó carteles con información de contacto y una foto de la chica.
Horas después de publicar el video en el que le decía su hija “quiero que sepas que te encontraré”, recibió una llamada anónima. Una mujer le dio una pista: la chica podría estar en un yate, cerca de White Cap Fish Market & Seafood Restaurant, un local ubicado en el barrio de Islip, en Long Island, en el puerto.
El papá de la adolescente se trasladó hasta la zona y comenzó a buscar, hasta que encontró la embarcación que le habían descrito y se metió en ella. La acción, riesgosa, terminó de la mejor manera posible: en el yate no había nadie más, salvo su hija. La historia fue confirmada por Gervasi, en declaraciones dadas a News12: “La encontré yo mismo antes de que llegara la policía. Fueron 26 días de infierno”.
“Creo que se trata de tráfico sexual”
Luego de esto, la adolescente fue trasladada a un hospital, donde fue internada para recibir distintos cuidados. Ese día, el 3 de enero, la policía detuvo a Francis Buckheit, acusándole por violación, secuestro y actuación lesiva contra la adolescente.
Dos días después de encontrarla, Gervasi dio una entrevista a The New York Post en la que compartió algunos detalles sobre lo ocurrido. “No se le permitía salir de la embarcación, a menos de que fuera escoltada por alguien”, dijo. “Fue forzada a hacer cosas que una chica de 14 años no debería tener que hacer”, agregó.
En relación con el caso y las investigaciones que se están desarrollando, Gervasi compartió su propia hipótesis: “Creo que se trata de tráfico sexual. (...) Este es un gran problema en el mundo y está presente en Long Island. Hago un llamado a todas las familias para que estén atentas a sus hijos. Esta gente (los captores) son depredadores y nada les importa nada”.