Un joven de 17 años, que sería un presunto extorsionador, murió luego de que un explosivo que pretendía arrojar a un negocio le explotara en la mano en la ciudad de Guayaquil, en Ecuador.
El episodio ocurrió el miércoles a la noche y quedó registrado por una cámara de seguridad. En el video, se ve al delincuente llegar al lugar en un auto de color rojo. Acto seguido, se acerca a un negocio y enciende un artefacto explosivo.
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Sin embargo, la jugada no salió como previsto: el artefacto le explotó en la mano y el hombre voló por los aires.
El comandante de la Policía de la Zona 8 de Guayaquil, Víctor Herrera, indicó al portal de noticias Primicias que el delincuente quedó desmembrado por el impacto de la explosión.
La policía intenta confirmar su identidad, pero se presume que sería un menor de edad.
Según la policía, “el taco de dinamita utilizado era similar a los utilizados en las actividades mineras”, informó el diario El Telégrafo.
“El mal uso de estos explosivos de manera no técnica puede producir estos efectos letales”, detalló el comandante Herrera.
Tras la explosión, el cómplice del joven arrancó y huyó del lugar, en medio de una nube de humo.
De acuerdo a información entregada por la policía, semanas antes, el dueño del local habría recibido amenazas telefónicas de parte de extorsionadores, quienes lo intimidaban con colocar explosivos en su negocio, informó Teleamazonas.
“Aún no estamos hablando de bandas, a veces hay quienes se etiquetan como tal y son gente sin experiencia que manipula explosivos de manera irresponsable”, agregó el comandante Herrera.
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Crisis de inseguridad en Ecuador
Ecuador afronta desde hace varios años el embate de la violencia ligada al narcotráfico, que se disputa el poder a sangre y fuego en las calles y las prisiones.
La guerra entre bandas deja más de 460 reclusos muertos en matanzas desde 2021, mientras que los homicidios se han cuadriplicado desde 2018, pasando de 6 a 26 por cada 100.000 habitantes entre 2021 y 2022. Para este año se espera una tasa de 40.
El presidente ecuatoriano Daniel Noboa, quien asumió en noviembre para un período de 18 meses tras elecciones generales anticipadas, impulsa una política de mano dura contra el narco. El Congreso votó este jueves a favor de una reforma constitucional que permite a las Fuerzas Armadas apoyar a la policía en el combate al crimen organizado.
Para enfrentar el alto nivel de inseguridad y la crisis penitenciaria, su antecesor Guillermo Lasso debió declarar un estado de excepción, que permitió la movilización de militares a las calles y cárceles.
