Un estudiante de arte surcoreano se comió una banana que formaba parte de una instalación del artista italiano Maurizio Cattelan porque se había saltado el desayuno y “tenía hambre”- Además, el joven describió su gesto como una “obra de arte”.
La obra titulada “Comediante” es parte de una exhibición del artista llamada “WE” en el Museo de Arte Leeum, en Seúl, y consiste en una banana madura pegada con cinta adhesiva a una pared.
Leé también: A días de la coronación, el hijo de un agricultor podría reclamarle el trono a Carlos III
El jueves por la tarde, el joven Noh Huyn-soo, que estudia en la Universidad Nacional de Seúl, visitó la muestra con un grupo de amigos cuando aparentemente se le antojó comerse la obra rica en potasio.
La escena duró cerca de un minuto y fue capturada por otros visitantes atónitos. En el video se puede ver a Noh acercarse a la obra, despegarla, pelar la banana y ahincar los dientes con determinación artística. Todavía con la boca llena, volvió a pegar lo que quedaba de banana a la pared y hasta posó brevemente al lado de la obra valuada en 120.000 dólares.
Cuando los empleados del museo le preguntaron por qué devoró la obra de arte comestible, el estudiante dijo que se había saltado el desayuno y que tenía hambre, según la BBC.
Más tarde Noh le dijo a un medio local que veía la obra de Cattelan como un acto de rebelión contra la autoridad. “Puede haber otra rebelión contra la rebelión”, le dijo el joven a KBS.
“El dañar una obra de arte puede también ser visto como una obra de arte. Pensé que eso sería interesante... ¿No está pegada allí para que la coman?”, preguntó, según el Korea Herald.
Leé también: Una novia tuvo una boda soñada en una playa, pero una conductora alcoholizada la mató a la salida de la fiesta
La reacción de Maurizio Cattelan
Cuando el propio Cattelan se enteró del incidente dijo: “No hay ningún problema”. La banana de Cattelan se reemplaza cada dos o tres días, de acuerdo con las instrucciones del artista. El museo decidió no reclamar daños y perjuicios al estudiante.
De hecho, no es la primera vez que alguien se devoró la famosa banana de Cattelan. En 2019, un artista de performance llamado David Datuna agarró la banana expuesta en Art Basel en Miami minutos después de que se vendiera por 120.000 dólares y se lo comió. Un video de Datuna comiendo el plátano con gran deleite se volvió viral en las redes sociales.
“Realmente amo esta instalación. Es muy deliciosa”, declaró alguna vez Datuna, al negar que sus acciones fueran vandalismo, si no una pieza de arte escénico.
