El amor por su abuela motivó a un hombre a tatuarse en el antebrazo un mensaje de felicitaciones que ella le regaló hace 26 años. La conmovedora historia ocurrió en San Pablo, Brasil.
Douglas Midena explicó al sitio brasileño g1 que su abuela le escribió la tarjeta en 1996, cuando cumplió 12 años. Esta era una época muy difícil para él, ya que había perdido a su padre y a su abuelo, dos partidas “muy duras para toda la familia”.
Leé también: “La Emperatriz”, una serie sobre Sissi de Austria y su vida cruzada por el amor y la tragedia
“Soy el menor de tres hermanos. Perdí a mi padre por un infarto en 1993, cuando solo tenía nueve años. Tuve la desgracia de verlo muerto en la camilla del hospital. Dos años después de su muerte, a mi abuelo le diagnosticaron un cáncer de médula espinal. La enfermedad le quitó la salud muy rápido y murió en 1995″, relató.
Explicó que la ausencia de las dos figuras paternas lo afectó grandemente y su abuela también vivió momentos terribles, “pero ella es una guerrera”. Así que el valor de las palabras de Luzia era incalculable. “Fueron palabras muy sinceras”, señaló el hombre.
El mensaje de una abuela fue un tesoro para su nieto
“Douglas, que tus días sean iluminados por la luz de la felicidad y tu corazón nunca cambie, que siempre sea el corazoncito tierno y dulce de la abuela. Feliz cumpleaños. Dios te proteja. Abuela Luzia 13-9-1996″, decía la nota que Douglas laminó y conservó todo este tiempo.
Estas palabras le dieron ánimo desde entonces y el tatuaje hizo crecer ese sentimiento con el que logró superar un cuadro de depresión sufrido recientemente.
“Siempre he tratado de cumplir en mi vida lo que ella me escribió. Que yo siguiera con mi luz, con mi buen corazón. Estas palabras de la matriarca de la familia hicieron toda la diferencia en el respeto que construí con mi esposa en un matrimonio de 21 años y la relación con mi hijo de 19 años”, confirmó Douglas.
Días después de su cumpleaños número 38, el brasileño visitó a su abuela de 92 años para mostrarle el tatuaje que se hizo en su honor. La sorpresa de Luzia se combinó con los recuerdos y las lágrimas.
“Mira que cosa más bonita”, dijo Luzia en el video, conmovida. “Hacía un año que Nilo (su esposo) se había ido”, recordó al ver la fecha.
“Me voy a morir con ella, ya no saldrá”, le aseguró su nieto. Luego, Luzia besó el mensaje tatuado y repitió el mismo deseo escrito al final: “Que seas feliz”.
El hombre estaba tan emocionado como su abuela: “Su reacción superó mis expectativas. Fue muy gratificante ver su reacción ante el homenaje que le hice”, le confesó al medio.
Luzia, de ascendencia italiana, es una mujer “con carácter” que trabajó como enfermera de guardería por más de 30 años. Se hizo cargo de cinco nietos y tres bisnietos y a pesar de su avanzada edad, se mantiene fuerte.
“Con 92 años, vive en una casita sola, pero cerca de mi prima. Hace su propia comida, va al banco, anda con un conductor de app. Es muy independiente, activa y lúcida”, afirmó Douglas.
