En las últimas horas, se encontraron las momias de otros dos niños que yacían en Cajamarquilla, localidad ubicada en la periferia de Lima, capital de Perú.
En total ya son 20 los cadáveres encontrados en el mismo lugar: ocho corresponden a niños, mientras que los 12 restantes son adultos. Todos tienen entre 800 y 1200 años de antigüedad.
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En el último tiempo se habían encontrado los restos de 14 personas, de los cuales seis eran chicos, en una investigación que comenzó en noviembre del año pasado.
El número aumentó luego de que los arqueólogos a cargo de las excavaciones de Cajamarquilla, la segunda ciudad preincaica más grande del país, hallaran dos nuevos fardos.
Aparentemente, su muerte se trató de un sacrificio para acompañar hacia el mundo de los muertos a la momia del “Señor de Cajamarquilla”, un personaje de clase social alta, que tiene entre 800 y 1000 años de antigüedad.
Los cadáveres dejan en evidencia la violencia que sufrieron ya que estaban envueltos en fardos de algodón y amarrados con sogas.
En el área externa de la tumba del “Señor de Cajamarquilla” también se encontraron objetos de cerámica, mates y elementos orgánicos y botánicos que acompañaban a los restos de estos 8 niños y 12 adultos, que podrían corresponder a algunos de sus hijos, esposas o sirvientes cercanos.
Según precisó Yomira Huamán, una de las encargadas de las excavaciones, la mayoría de los cuerpos adultos corresponden a hombres, mientras que los restos de las mujeres y niños se encuentran mejor conservados por estar envueltos en los telas.
Al parecer, estas personas pertenecían a la cultura Wari, una civilización andina que floreció en el centro de los Andes aproximadamente desde el siglo VII hasta el XIII.
Los arqueólogos solo excavaron el 1% del complejo y podría haber más momias
Hasta ahora, los arqueólogos apenas excavaron el 1% de las hectáreas totales del complejo. Esto se debe a la dificultad para obtener los permisos del Gobierno peruano para seguir con las excavaciones y también por el financiamiento.
Jerí Gloria Ramón Ruffner, rectora de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos (UNMSM), pidió que los organismos nacionales e internacionales colaboren con este proyecto: ”El problema son los recursos, el presupuesto. La Universidad de Salamanca, las universidades de España tienen que venir a apoyarnos”, dijo.
En los próximos meses, algunas de las muestras halladas en Cajamarquilla serán enviadas a laboratorios especializados en el extranjero para obtener los resultados de radiocarbono, de ADN y estroncio, entre otros, con el fin de saber con mayor precisión la procedencia de las personas encontradas.
