La Armada de Estados Unidos vendió dos antiguos portaaviones fuera de servicio, el USS Kitty Hawk y el USS John F. Kennedy, a un precio irrisorio: un centavo cada uno.
La compradora es una compañía de desguace de barcos, la International Shipbreaking Limited (ISL), que tiene su base en Brownsville, Texas, anunció el Comando de Sistemas Marítimos Navales.
La adquisición parece ser un negocio redondo para la empresa, aunque deberá hacerse cargo de los costos del traslado.
“Los valores del contrato reflejan que la compañía contratada se beneficiará de la venta posterior de la chatarra de acero, hierro y metales no ferrosos”, dijo Alan Baribeau, vocero del Comando de Sistemas Marítimos Navales estadounidense, citado por USA Today.
Ambos buques fueron claves en la Guerra Fría
Ambos portaaviones tuvieron importantes roles durante la Guerra fría, pero ya están viejos y caducos para los cánones que maneja la Armada norteamericana.
Los dos buques se botaron en la década de 1960 y eran capaces de transportar docenas de aviones. Hoy se consideran simple chatarra.
El USS Kitty Hawk fue puesto en funcionamiento en 1960 y se utilizó en la guerra de Vietnam. Fue dado de baja en 2009. Fue el último buque de guerra activo de su clase y el último portaaviones en servicio de la Armada de Estados Unidos impulsado por gasoil. Estuvo casi 49 años de servicio activo y fue reemplazado por el George H. W. Bush.
Un grupo de ciudadanos había presionado para convertirlo en un museo flotante, pero la idea no tuvo éxito.
En tanto, el USS John F. Kennedy fue botado en 1964. Fue bautizado tres años después por Kacqueline Kennedy y su hija Caroline en Newport, Virginia. Inicialmente fue un buque apto para el combate aéreo, pero con el tiempo fue preparado y puesto en condiciones para la guerra antisubmarina. A lo largo de casi 40 años de servicios, estuvo involucrado en la Guerra del Golfo y quedó inactivo hace cuatro años.
“Remolcar y desguazar barcos es un proceso costoso y la Marina ya pagó a ISL grandes sumas de dinero para reciclar sus barcos”, informó el Brownsville Herald.
Ambos buques han estado desde su salida de servicio en astilleros navales. Ahora serán remolcados a Brownsville, en Texas, para su desguace en los próximos meses, dijo un portavoz de ISL citado por el periódico.
No se ha establecido aún un calendario preciso ni para la partida ni para el desmantelamiento de los buques, añadió el informe divulgado por la prensa estadounidense.
