Estados Unidos fue golpeado en las últimas horas por dos tormentas que causaron graves inundaciones que dejaron al menos 21 muertos en Tennessee, en el centro-este del país, y unos 100 mil hogares sin luz en la región del nordeste.
El hecho más grave ocurrió en el estado de Tennessee donde una devastadora tormenta provocó 21 muertos y 45 desaparecidos, según el reporte de la Agencia de Gestión de Emergencias del Condado de Humphreys citado por la CNN.
Los equipos de emergencia y rescate trabajaban este domingo en la zona, mientras las autoridades locales pidieron la colaboración ciudadana para localizar a los desaparecidos, incluidos dos niños, informó el Departamento de Seguridad Pública de Waverly.
”Estamos pidiendo a los residentes que se mantengan alejados de los vecindarios y las carreteras mientras se llevan a cabo los esfuerzos de rescate”, dijo el jefe de seguridad pública de Waverly, Grant Gillespie.
Por su parte, el sheriff del condado, Chris Davis, dijo a una cadena local filial de CNN que la mayoría de los desaparecidos son residentes de una de las zonas más afectadas debido a un aumento extraordinario del nivel del agua. Entre los fallecidos hay personas mayores y menores de edad.
Los condados afectados son los de Humphreys, Hickman, Houston y Dickson, informó la Agencia de Gestión de Emergencias de Tennessee. La Guardia Nacional desplegó a 50 efectivos y envió un helicóptero Blackhawk al lugar, así como vehículos tácticos y todoterreno.
La tormenta tropical Henri
Pero este no fue el único fenómeno meteorológico que azotó a Estados Unidos. La tormenta tropical Henri golpeó este domingo el noreste del país con fuertes lluvias y vientos al tocar tierra en la costa de Rhode Island, dejando sin electricidad a más de 100.000 hogares. Además, provocó aluviones que obligaron a cerrar puentes, inundaron caminos y dejaron a muchas personas varadas en sus vehículos.
El meteoro fue degradado de huracán a tormenta tropical antes de llegar a Nueva Inglaterra. Hubo algunos reportes de daños serios por viento u oleaje.
Se espera que la tormenta se aleje rumbo al Océano Atlántico para la noche del lunes.
El presidente estadounidense Joe Biden prometió brindar ayuda federal lo más pronto posible para los habitantes de los estados del noreste afectados por la tormenta y declaró zona de desastre en gran parte de la región.
Para el domingo por la tarde, Henri tenía vientos máximos sostenidos de alrededor de 64 km/h cuando recorría tierra firme por Connecticut, de acuerdo con el Centro Nacional de Huracanes. Cuando tocó tierra cerca de Westerly, Rhode Island, tenía vientos sostenidos de aproximadamente 96,5 km/h y ráfagas de hasta 112,65 km/h.
Varios puentes importantes en Rhode Island, que unen gran parte del estado, se cerraron brevemente el domingo y algunas carreteras costeras estaban casi intransitables.
