El oso panda, también llamado panda gigante, es una especie de mamífero del orden de los carnívoros. Desde hace años que estos animales estaban al borde de la extinción. Las razones eran la pérdida de su hábitat natural, la caza furtiva y su dificultad para reproducirse en cautividad. Su hábitat natural se limita actualmente a seis zonas repartidas en las provincias chinas de Sichuan, Shaanxi y Gansu, según declaró el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF).
Desde el mes de julio, el Gobierno Chino declaró que dejó de ser una especie “en peligro” de extinción para pasar a la categoría de “vulnerable”. Esto se logró gracias a que el número de osos pandas salvajes alcanzó los 1.800 ejemplares asiáticos. El nivel ‘vulnerable’ es el quinto nivel dentro de la escala de especies en peligro de extinción, mientras que ‘en peligro’ es el cuarto. Aunque ahora tengan menos peligro, su estado sigue siendo delicado.
Según informó el National Geographic, en 2010 apenas quedaban 1.000 pandas gigantes en libertad, mientras que unos 100 habitaban en zoos. Gracias a la conservación y protección, en los últimos diez años se ha podido aumentar en más de 800 el número de osos pandas.
En las últimas horas, una noticia alegró a toda la comunidad interesada en esta especie de animales. En Singapur, nació por primera vez una cría de oso panda gigante. El ejemplar pesó alrededor de 200 gramos al nacer. Por ahora se desconoce el sexo del animal. Es muy difícil que nazca un animal que ha estado en peligro de extinción, por eso la felicidad de todos.
El primer ministro de Singapur, Lee Hsien Loong, mostró su dicha ante el pueblo y felicitó al equipo de Reservas de Vida Silvestre de Singapur a través de su cuenta de Facebook: “Es famoso que los pandas en cautiverio tengan dificultades para reproducirse. Los pandas solo tienen una ventana estrecha cada año para concebir. Sus cuidadores merecen felicitaciones por este logro difícil y raro, y por perseverar a pesar de los fracasos anteriores”.
Los osos pandas gigantes, Kai Kai y Jia Jia, de 13 y 12 años respectivamente en la actualidad, llegaron a Singapur en 2012. En el año 2015, se aparearon por primera vez. Finalmente, este 14 de agosto la madre dio a luz nuevamente luego de siete intentos.
Otras especies en peligro de extinción
El oso panda no es el único animal que ha logrado recuperarse de estar en peligro de extinción. Cui Shuhong, director del Departamento de Protección Ecológica del Ministerio de Ecología y Medio Ambiente, mencionó durante una rueda de prensa que especies como los tigres, leopardos siberianos y el ibis nipón (ave asiática), también aumentaron en número. Además, aseguró que “se han mejorado las condiciones de vida de algunas especies raras”, no solo de los osos pandas, sino también de los antílopes tibetanos y los ciervos del padre David (una especie nativa de China).
