Un grupo de científicos que visitaron la parte norte de Tanzania encontraron “accidentalmente” huellas de pezuñas que datan de 1,8 millones de años. Los especialistas del Instituto Lyell, de la Universidad Heriot-Watt, estaban en un viaje de investigación en el este de África cuando hallaron las huellas fosilizadas durante el trabajo de campo geológico que realizaban en Olduvai Gorge.
Las huellas fueron descubiertas por Tessa Plint, una investigadora de doctorado, quien se mostró sorprendida cuando las encontró, describiendo el hallazgo como “sorprendentes” e indicando que estaba “en el lugar correcto en el momento correcto”. Plint añadió: “Fue un momento muy emocionante”.
El hallazgo consistió en un total de tres huellas y cada una de ellas midió aproximadamente siete centímetros de largo. Recientemente se han publicado los resultados y las conclusiones en un estudio.
Las huellas prehistóricas fueron dejadas por mamíferos cuadrúpedos de pezuña hendida que se cree que fueron los antepasados de las actuales antílopes y gacelas. Las impresiones se hicieron cuando estos mamíferos caminaron sobre la ceniza que acababa de caer después de que ocurriera una erupción volcánica cerca del lugar.
Desfiladero de Olduvai
El doctor Clayton Magill, que es profesor asistente en el Lyell Center, opinó sobre el descubrimiento: “Las huellas fósiles capturan una instantánea en el tiempo. Es un descubrimiento que sugiere que si las huellas fósiles se pueden preservar en los sedimentos en la garganta de Olduvai, entonces existe la posibilidad de futuros descubrimientos de animales grandes o tal vez incluso huellas de homínidos tempranos en esta área“.
“Sabemos con certeza que el animal estuvo físicamente presente en ese entorno en un momento específico en el pasado“, continuó diciendo el especialista quien indicó que las impresiones estaban increíblemente bien conservadas, como si se hubieran hecho ese mismo día.
La Garganta de Olduvai es un sitio muy importante para el hallazgo de restos prehistóricos. Plint señaló que anteriormente se habían encontrado huellas fosilizadas pertenecientes a aves en el sitio en capas de rocas más jóvenes, pero nunca se habían descubierto huellas pertenecientes a grandes animales terrestres hasta ahora.
“Mucho de lo que se sabe sobre el antiguo ecosistema en Olduvai Gorge proviene de huesos y dientes fósiles”, añadió.
Y cerró: “Las huellas fósiles, o en este caso, las huellas de los cascos fósiles ofrecen una ventana única al pasado. Tienen el potencial de informarnos sobre el comportamiento del rastreador, algo que es muy difícil de determinar en los animales extintos“.