Una dramática situación vivió una pareja en Queensland, Australia, al ser sorprendida por una enorme pitón, que se subió al parabrisas y empezó a deslizarse por toda la parte frontal del vehículo mientras manejaban por la ruta.
Estupefactos, Melissa Hudson, de 43 años, y su pareja Rodney Griggs, de 52, filmaron toda la escena, que inició cuando el animal apareció de repente sobre el capot y comenzó a dirigirse hacia la ventanilla del conductor. Esto ocurrió el pasado 15 de febrero, en un tramo de la carretera que conecta Alligator Creek y Giru, en el norte del estado.
En las imágenes, que se hicieron virales estos últimos días, se puede ver a Rodney conduciendo y a Melissa de acompañante. Ambos iban tranquilos, hasta que el hombre pegó un grito desesperado, alertando a su pareja de que el reptil se encontraba deambulando en el parabrisas.
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Inmediatamente, la mujer se puso a grabar y ambos empezaron a reírse, quizás por los nervios de la situación, mientras trataban de no sacarle la mirada ni al animal ni a la ruta. “Seguí conduciendo, concéntrate en la carretera”, dice la señora en el video, mientras se puede ver cómo la serpiente entorpece la visión del conductor.
Sin saber qué hacer, Griggs encendió los limpiaparabrisas. Eso provocó que el animal sea enviado de un lado para el otro, terminando cerca de la ventana de Hudson.
Esta situación duró varios minutos. Ni Melissa ni Rodney sabían cómo deshacerse de la serpiente. Al ver que se trataba de una misión imposible, estacionaron el vehículo al costado de la ruta y, con ayuda de otra persona, lograron zafarse del animal.
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Parece que las serpientes tienen afinidad por los autos
En octubre del pasado año, se dio un hecho similar, aunque en el otro lado del mundo. En Estados Unidos, retiraron de un Ford Mustang a una serpiente pitón de tres metros de largo, que se había escondido en el motor.
Según el canal televisivo local WSVN, la persona propietaria del Ford Mustang llevo el auto a un taller de Dania Beach porque se le encendió la luz que avisa de problemas en el motor. Al abrir el capó encontraron que el problema no era mecánico, sino que se trataba de una serpiente enorme. Pese a la resistencia, el animal fue retirado con cuidado; llegó a hacer falta cuatro personas para hacerlo.
Si nos vamos a Europa, más precisamente Alemania, también está el caso de Tesla. Porque aunque no encontraron ninguna serpiente dentro de un vehículo de la empresa, liderada por Elon Musk, sí tuvieron que paralizar las obras en su fábrica de automóviles por la presencia de serpientes el año pasado.
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