La universidad peruana a cargo de los ensayos de una vacuna china contra el COVID-19 negó el domingo que el expresidente Martín Vizcarra fuera voluntario del estudio, tema que desató una tormenta política en el país.
La Universidad Peruana Cayetano Heredia (UPCH), a cargo de la investigación de la vacuna de la china Sinopharm en el país sudamericano, dijo que “el investigador principal informó (a las autoridades sanitarias) que el señor Martín Vizcarra y la señora Maribel Díaz Cabello no forman parte del grupo de 12.000 voluntarios sujetos de investigación”, y que se han cumplido todos los protolocos y normas nacionales e internacionales en el estudio.
La aclaratoria de la casa de estudios viene a desmentir las declaraciones del expresidente Martín Vizcarra de esta semana. “Tomé la decisión, valiente, de sumarme a los 12.000 voluntarios” que participarían en el ensayo, dijo.
Vizcarra quiso así justificar la revelación periodística de un diario que indicó que siendo presidente (2018-2020) había sido vacunado en secreto, unas semanas antes de que fuera destituido por el Congreso en noviembre en un juicio político relámpago.
La UPCH añade que entregaron toda la información requerida al estatal Instituto Nacional de Salud, en su carácter de autoridad competente, y que se realizó una “inspección extraordinaria al ensayo clínico de la vacuna de Sinopharm el 12 de febrero” en la universidad.
El exmandatario de 57 años, que es candidato al Congreso en las próximas elecciones de abril, aseguró que aceptó ser parte de los ensayos a pesar de la recomendación de un colaborador de no hacerlo por ser “muy riesgoso”.
Dijo que no lo había hecho público porque “los voluntarios deben mantener la reserva” sobre el ensayo, y contó que también había sido vacunada su esposa, Maribel Díaz.
Esta polémica incidió en que la ministra de Salud, Pilar Mazzetti, en el cargo desde julio de 2020, renunciara este viernes cuando el Congreso se preparaba para promover su censura y destitución, pese a que Mazzetti manifestó no conocer nada sobre el proceder del exjefe de Estado peruano.
Muy golpeado por la segunda ola de la pandemia, Perú inició esta semana la vacunación contra el covid-19 entre el personal sanitario, dos días después de que llegaran las primeras 300.000 dosis de Sinopharm.
El gobierno interino de Francisco Sagasti aspira a poder vacunar a 10 millones de personas antes de finalizar su período constitucional en julio, y anunció que ya están contratadas 48,24 millones de dosis de vacunas, de las que se han recibido un millón.
Perú acumula hasta este sábado 43.491 fallecidos por covid-19, con 1,22 millones de casos confirmados y 1,13 millones de personas recuperadas. El sistema de salud se encuentra saturado con 14.222 hospitalizados y un déficit de 20% en la demanda de oxígeno medicinal.
Fuente: AFP