Una mujer está viviendo un calvario desde que le disparó por accidente a su vecino con una pistola de agua. El hombre la denunció y ahora ella podría ir a la cárcel. El insólito episodio ocurrió en Ontario, Canadá.
Wendy Washik fue acusada de agresión con un arma después de rociar con agua a un vecino en el pecho mientras jugaba con nenes en el patio de su casa después de un asado familiar. La mujer le pidió disculpas en el momento pero el hombre decidió acudir a la Justicia.
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Todo comenzó el 1 de septiembre, cuando Wendy jugaba con sus hijos en el jardín. Habían disfrutado de una parrillada y todo parecía ir bien, pero en un momento, en una maniobra accidental, disparó la pistola de agua que estaba manipulando en dirección a la casa de al lado, y el chorro impactó en el pecho del vecino que estaba cortando el pasto.
El hombre se lo tomó muy mal y comenzó a gritarle. Él la acusaba de haberlo “agredido físicamente”. Wendy le pidió disculpas de inmediato y le dijo que había sido sin querer, pero el vecino no aceptó sus disculpas, entró a la casa y llamó a la policía. Desde ese día, Wendy vive una verdadera pesadilla.
Los agentes llegaron a la vivienda y al escuchar las versiones de los involucrados, determinaron que dos personas habían tenido una “disputa” que tuvo como resultado una víctima. La mujer dijo que los policías no se interesaron por ver la pistola de agua antes de acusarla.
El episodio llamó la atención de los periodistas, ya que el “arma” con el que se agredió a la supuesta víctima, era de juguete. Pero cuando los cronistas le pidieron al portavoz policial que confirmara que el arma utilizada era de agua, el agente les respondió que era “inapropiado” entrar en los detalles del caso.
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Wendy es asistente educativa en la Junta Escolar del Distrito Católico de Norfolk y desde que se vio envuelta en este escándalo no pudo volver a trabajar, ya que sus superiores le advirtieron que para reincorporarse tiene que solucionar su situación legal.
La mujer denuncia ante los medios locales que este incidente la afectó gravemente a ella y a su familia: “Cada día sigue siendo una lucha, es difícil no darle vueltas constantemente y pensar que me van a juzgar por agresión”, dijo en una entrevista para la televisión canadiense.
Además, los gastos que tuvieron que hacer para pagar los honorarios de los abogados representaron una significativa pérdida para la familia de Wendy. Por eso, habían iniciado una colecta en la plataforma gofundme, donde habían recaudado más de 12.000 dólares, pero su cuenta fue clausurada porque la mujer afrontaba “un cargo penal” y la página no permite recaudar dinero en esos casos.
