Sara Blake Cheek, una mujer de 33 años, reveló que a su hijo le prohibieron jugar en un equipo de hockey. ¿La razón? A los padres de los otros nenes no les gustaba cómo ella se vestía. Debido a las constantes críticas que recibió, Sara tuvo que abandonar su casa en la Florida para instalarse junto a su familia en Las Vegas.
La mujer era propietaria de un salón y había estado viviendo en una mansión en Florida después de alcanzar la fama y la fortuna con su carrera en línea durante la pandemia. Después de estos incidentes, Sara se mudó a una casa de un millón de dólares dentro de una pequeña comunidad cerrada con vista al Strip de Las Vegas. A pesar de lamentar -en un principio- tener que abandonar su hogar, ahora afirma que es más feliz donde vive actualmente.
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“Mis hijos están rodeados de otros niños cuyos padres no son de mente estrecha”, aseguró. Además, contó: “Mis fans fueron las primeras personas en notar lo mucho más feliz que me veía en mi contenido y ahora me río de todas las personas miserables que me criticaron”.
Echaron a su hijo de un equipo deportivo
La millonaria Playmate contó que las madres que la criticaban le prohibieron jugar a sus hijos con los de ella. “Mi hijo de diez años se quedó llorando tras ser excluido de la pista de hielo local para jugar hockey”.
Ella afirmó que, mediante un correo electrónico, la familia fue avisada que ya no se le permitía ingresar al edificio debido a una “conducta inaceptable” durante un partido. Sin embargo, Sara argumentó que esta medida fue impuesta a modo de castigo por trabajar como modelo de OnlyFans.
Alejada de los escándalos, ahora la mujer asegura que sus vecinos están centrados en sus propias vidas y no la juzgan. También dijo que era mucho más común ver a una “mamá sexy” caminando por las calles y que ya no se sentía como la excepción a la regla.
“Las Vegas es, sin duda, el lugar más genial en el que he vivido. A nadie le importa lo que hacen los demás. Mudarme aquí me ha abierto nuevas puertas y mi mensaje para otras madres que están lidiando con la discriminación de los suburbios miserables es que cambien de entorno o sigan luchando: pueden ganar y lo harán”, concluyó.