Una mujer fue dada por muerta en el hogar de ancianos donde vivía pero “revivió” horas después durante el velorio. El hecho ocurrió el pasado 3 de junio en Estados Unidos, pero se dio a conocer en las últimas horas.
Constance Glantz, de 74 años, no presentaba signos vitales, según informó el personal del asilo Mulberry, en la ciudad de Waverly. Fue declarada muerta minutos antes de las 10 de la mañana (hora local) y dieron aviso a la empresa de sepelios para que pase a buscar el cuerpo.
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El protocolo siguió su curso y la anciana fue trasladada a la funeraria, sin embargo, cerca de las 12 de mediodía, cuando el personal iba a comenzar a prepararlo para ponerlo en el ataúd, se dieron cuenta que la mujer aún respiraba.
Alarmados por la situación, llamaron de inmediato al servicio de emergencia. En cuestión de minutos llegó un equipo médico para atender a Constance y la trasladaron a un hospital donde permaneció internada para realizar un seguimiento.
Nadie se dio cuenta que la mujer estaba viva
Durante la última semana, Constance Glantz Durante estaba siendo atendida por un médico porque su estado de salud se había deteriorado. El personal del asilo estaba en alerta, vigilando a la mujer. Según declaró Ben Houchin, jefe de policías del condado de Lancaster, era una muerte “anticipada”.
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Pero, ¿cómo llegó al cuerpo a la funeraria sin que nadie notara que Constance aún estaba viva? Houchin explicó que “si el médico tiene la voluntad de firmar el certificado de defunción y no hay nada sospechoso en ello, todo concuerda”, ya que debido a su crítico estado de salud, la muerte era esperable.
A su vez, afirmó que en esos casos no es necesaria una investigación forense, así como tampoco acude un oficial para comprobar lo que sucedió, por eso no intervino ningún policía en el asilo para notificar la muerte de la mujer.
“Este es un caso muy inusual. He estado haciendo esto durante 31 años y nada como esto había llegado a este punto antes”, concluyó Houchin.
