En algunas ocasiones, en redes sociales, se leen historias increíbles de cualquier tipo aunque pocas veces tan insólitas como esta: a través de una prueba de ADN, un hombre descubrió que su padre tenía una segunda familia en otra ciudad y que sus hijos tenían los mismos nombres que él y sus hermanos.
La historia fue compartida en Reddit por uno de los nietos del abuelo infiel y rápidamente se hizo viral. Según el chico, la otra familia sí sabe de la existencia de ellos pero nunca les dijeron nada. “No estoy sorprendido, estoy en shock”, escribió.
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“Mi tío hizo una prueba de ADN de ascendencia y descubrió que mi abuelo tenía una segunda familia completa en una ciudad cercana a mi padre, mis tíos y mi abuela”, describió el joven y agregó que un detalle los descolocó: los integrantes de esa familia tienen los mismos nombres que ellos.
De acuerdo al relato del nieto, “cada familia tiene tres hijos (todos con el mismo nombre) y la otra familia tiene una hija. Abandonó a la segunda cuando mi padre y sus hermanos estaban terminando la escuela secundaria”.
A pesar de que ahora todos saben la verdad, ninguno se anima a enfrentar al abuelo infiel y preguntarle acerca de la historia, sino que decidieron quedarse callados y esperar que los otros familiares hagan el primer contacto.
Un hombre se hizo un análisis de ADN y su vida cambió para siempre
Hace siete años Samuel estaba felizmente casado con su esposa cuando decidieron convertirse en padres. Con el paso de los meses la mujer quedó embarazada y todo fue color de rosa. Sin embargo, la felicidad se transformaría poco a poco en sospechas y miedos.
Es que luego del nacimiento del niño, los amigos de Samuel alimentaron la idea de que, ante la falta de parecido y algunas situaciones extrañas del comportamiento de la mujer, el pequeño podría no ser su hijo. En ese momento, Samuel decidió hacer una prueba de ADN.
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Al recibir el resultado del estudio, la incertidumbre dio paso a la amargura: el nene que había amado y criado durante siete años no era su hijo biológico. “Siete años diciéndome “papá” y yo diciéndole “hijo”, siete años juntos compartiendo la vida. Es la única personita que pudo sacar tanto amor de mí, pero hoy mi sentimiento es peor que un luto y no le deseo esto a nadie jamás”, escribió el hombre angustiado en sus redes sociales.
En cuanto a la mamá del pequeño, Samuel expresó: “No te deseo el mal a vos, que sos su madre de sangre, pero lastimosamente la vida y el karma algún día te van a sacar las cuentas por destrozarme en vida a mí y a esa criatura inocente”.
La abogada especialista Alicia Palacios, que lleva adelante el caso, sostuvo que “hay muchos casos similares que están saliendo a la luz e incluso, las madres pueden ser denunciadas por daño moral. Hay un mito de que el hombre no denuncia pero ahora se están rompiendo algunos de esos paradigmas tradicionales en pos de asegurar la justicia”.
