Thomas Wedders se hizo conocido en el mundo por ser el hombre con la nariz más larga en la historia. Lo que muchos podrían considerarlo un defecto, Wedders lo usó como un atractivo y así se presentaba en los shows en los que participaba. El hombre era miembro de un circo callejero y viajaba por todo Yorkshire, Inglaterra, exhibiendo su enorme nariz. Los prejuicios no eran un obstáculo para él.
Si bien hay poca información sobre su vida y poco se conoce de su historia, se sabe que su nariz midió 19 centímetros, según figura en el Record Guinness.
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Wedders vivió en el siglo 18, por lo que no hay fotografías de la época. Sin embargo, fue retratado en numerosas ilustraciones y pinturas. Hasta tiene una escultura de cera en el museo Ripley’s Believe it of Not, en Inglaterra. Al verla se pude dimensionar el tamaño real de su nariz.
Según consta en el libro World Guinness Records, Wedders vivió en Inglaterra durante la década de 1770 y era miembro de un circo ambulante. Durante 300 años batió el récord de la nariz más grande del mundo.
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En los documentos de la época, hay una nota del The Strand Magazine, Vol. XI, que se publicó en 1896, y que da cuenta de su particular aspecto. “Así, si las narices alguna vez fueron uniformemente exactas en representar la importancia del individuo, este digno debería haber amasado todo el dinero en Threadneedle Street y conquistado toda Europa, porque esta prodigiosa nariz suya era un compuesto de lo codicioso con lo marcial”, señalaba el texto.
Wedders falleció a los 50 años. Si bien no se conocen las causas de su muerte, The Strand Magazine sostiene que falleció a causa de una discapacidad intelectual, producida por su deformidad facial.
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En una nota publicada sobre Wedders señaló: “Su barbilla era demasiado débil o su frente demasiado baja, o la naturaleza se había agotado tanto en la tarea de darle una nariz a este prodigio que se olvidó por completo de dotarlo de cerebro; o quizás, la nariz desplazó a este último bien”.