Un momento de extrema tensión quedó registrado por una cámara durante un truco aéreo que realizó un grupo de paracaidistas en Faro, Italia. Las imágenes muestran con exactitud los inconvenientes técnicos que podrían haber llevado a un joven a tener un desenlace fatal.
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Los hechos se registraron en una caída en picado 14.000 pies a la tierra durante un salto en que el paracaidista Toms Vajeika, oriundo de Riga, la capital de Letonia, participaba en un paracaidismo en ángulo con su novia y otras 25 personas.
El joven es un ingeniero marino de 30 años, experimentado en la disciplina ya que este era su salto número 200 lo cual le otorgó las herramientas necesarias y el temple para resolver la difícil situación de la mejor manera actuando de forma veloz.
Es que tal como se ve en las imágenes, que quedaron captadas por las cámaras, las líneas del paracaídas de Toms Vajeika se retorcieron mientras se precipitaba hacia el suelo y en las imágenes se puede ver el momento exacto y el intento desesperado del joven por desenroscar las cuerdas que habían quedado atascadas.
En el video se puede percibir la carrera desesperada del paracaidista Vajeika contra el tiempo para desenroscar el paracaídas mientras ya se encontraba en plena caída y su vida corría serio peligro.
En el video la desesperación de Toms Vajeika queda registrada segundo a segundo y se puede escuchar al paracaidista maldiciendo en el momento de extrema tensión en el que percibe que todo podía salir mal ya que vio que las líneas del dispositivo de tela estaban completamente enredadas.
La pesadilla había comenzado momentos antes y, tal como muestran las imágenes del video subido a las redes sociales del deportista extremo, se puede ver a Vajeika saltar con confianza del avión para unirse a los demás en el truco el 11 de julio.
Mientras caía a velocidades de hasta 170 mph, soltó su paracaídas pero el video muestra los pies del paracaidista girando en el aire y se puede escuchar a Toms Vajeika gritar cuando se da cuenta de que las líneas se habían enredado.
El video luego cambia a imágenes de la cámara de cabeza de su novia, que lo muestra luchando por controlar su paracaídas. Pero mientras giraba salvajemente, se las ingenio para agarrar las líneas y evitar que se retuercen.
Increíblemente, el paracaidista Toms Vajeika luego logró desenredar el paracaídas mientras continuaba cayendo hacia la tierra recuperando el control a tiempo para un aterrizaje seguro en un campo junto al resto de los saltadores.
Como balance de la drástica situación que tuvo un final feliz, luego de los momentos de tensión, como puede verse en su perfil oficial de Instagram Vajeika también amante de kitesurf, snowboard y hockey, escribió: “A veces es bueno, a veces es una mierda”.
