Tras cuatro décadas de trayectoria actoral y con un Oscar en mano, Laura Dern fue agasajada en la nueva tapa de Vogue España. Es la primera vez que la actriz es retratada por esta revista de moda, pero los deslumbrantes resultados dan cuenta de un talento realmente innato. Definitivamente valió la pena esperar.
Capturada por Alexi Lubomirski, días antes del aislamiento obligatorio, Laura logra encarnar la pasión, empatía y valentía femeninas, en un número que discute sobre la libertad y diversidad actuales.
“Me emociona publicar, precisamente en este momento, la primera portada de Vogue con una mujer que encarna tan bien nuestros valores”, declaró una editora. “Cuando lo planeamos, no podíamos prever que este reportaje viera la luz en un momento tan impensable como el de ahora, pero creo que la coherencia, el compromiso artístico y la personalidad de Laura Dern resultan, si cabe, más pertinentes que antes”.
Con una serie de estilismos total black de distinguida elegancia, la actriz desplegó su faceta más sensual. Cuatro vestidos de gala monocromáticos con maxivolados, escotes y tajos extravagantes hacen al rasgo icónico de la producción, donde el blanco y negro tiñe todas las fotografías.
El último look, a su vez, nos recuerda al minivestido con escote corazón invertido que llevaron Úrsula Corberó y Zoe Kravitz meses atrás. Firmado por Yves Saint Laurent, fue combinado con una falda de tiro alto metalizada.
