La mujer de Aries, nacida entre el 21 de marzo y el 19 de abril, pertenece a un signo de Fuego. Audaz, atrevida y divertida, se produce a diario para salir a conquistar el mundo, literalmente. Su estilo es arriesgado e innovador, apasionante ante el ojo ajeno: la ariana es la que lleva a la ropa, y no al revés.
A la hora de seleccionar sus prendas, no se esconde detrás de colores y texturas demasiado extravagantes, sino que prefiere aquellos más nítidos y simplistas. Entre géneros lisos y estampados, se identifica más con los primeros, evitando a toda costa que su ropa opaque su figura y presencia. La ariana resalta por sí misma, prescindiendo de cualquier herramienta superficial para lograrlo.
Su sentido de la moda puede resumirse en una única palabra: equilibrio. Buscará siempre fusionar lo simple con lo maximalista, prestando especial atención a los detalles y las combinaciones en general. Es decir, solo se decantaría por un cuello con maxivolados plisados si el resto del outfit es lo suficientemente básico como para contrarrestarlo.
La mujer de Aries se caracteriza por su intrínseca originalidad: jamás adapta sus elecciones de vestuario a las tendencias o convenciones pasajeras que nada tienen que ver con su estilo. Además, su seguridad personal favorece el tiempo que dedica a encontrar qué ponerse: en unos pocos minutos logra verse espléndida y atractiva. ¡Su única biblia de moda es ella misma!
¿Su fetiche indiscutible? Un sensual y ajustado vestido rojo. Para el día, prefiere las faldas lápiz, remeras con estampas o inscripciones y leggings de cuero de buena calidad. La ariana no necesita escotes para verse sexy, y hasta suele proteger su cuello con misteriosas chalinas y pañuelos.
Con respecto a los accesorios, el calzado es su debilidad. Los stilettos altos (preferentemente rojos) son su comodín indiscutible y puede usarlos a cualquier hora del día para cualquier ocasión: su efecto elegante, decidido y estilizador fascina a su fashionista interior.
Su color estrella es, por supuesto, el rojo. No sólo por sus cualidades de empoderamiento y seguridad, sino que también transmite pasión, entereza y fortaleza.
