Michael Kors se inspiró en la época dorada de Hollywood y en el vestido de novia de su abuela para esta colección otoño invierno que presentó en la Semana de la Moda de Nueva York.
La atención al detalle del diseñador se reflejó en la estructura de las prendas. “Muchas de las chaquetas y abrigos de esta temporada son demostrativos. Tienen cinturas estrechas, hombros más fuertes y abrigos con personalidad. Esto definitivamente no es, ya sabes, una campera acolchada de naylon negro”, describió el propio Kors.
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Con el telón de fondo del edificio Barneys original en la ciudad de Nueva York, la colección mostró una paleta de negro, blanco de pies a cabeza y tonos cálidos de capuchino y chocolate. Además de los colores que Kors llamaba “colores de maquillaje”, incluían rosas tintadas y rosas sofisticados.
Dentro del vestíbulo con espejos, la multitud repleta de celebridades incluía a Blake Lively, Katie Holmes, Rachel Zegler, Brie Larson, Gabrielle Union. También estuvo presente la editora en jefe de Vogue, Anna Wintour, así como la artista Kelsea Ballerini.
“Cuando el mundo está patas arriba, creo que mi trabajo es hacer que la gente se sienta más segura. Es así de simple”, dijo Kors.
Su madre, Joan Kors, que murió el año pasado, tuvo una fuerte influencia en su vida y carrera. Y aunque su legado permanece en el diseñador, esta vez fue su abuela quien lo inspiró. “Encontré el vestido de novia de mi abuela y ella se casó en los años 30, y comencé a profundizar en los años 30 porque su vestido parecía increíblemente moderno”, contó el diseñador.
A partir de ahí, pensó en el viejo Hollywood. “Vimos los dos lados de la personalidad de las mujeres, vimos cosas que eran muy sensuales y vimos a Carole Lombard y Jean Harlow, y luego vimos a los grandes “marimachos” clásicos como Marlene Dietrich y Katharine Hepburn y el hilo conductor que todo eso seguí adelante”, dijo Kors.
La colección incluye una variedad de chaquetas de tweed, abrigos cruzados, faldas con aberturas y vestidos de lentejuelas. Había suéteres de cuello alto de cachemire, gafas gruesas y bolsos delgados. Con algunas excepciones, la mayoría de los diseños emplearon una paleta de colores neutros, con algo de gris y mucho negro.
“El negro es definitivamente parte de la colección. Pero también está el impacto de vestir de blanco de pies a cabeza en invierno. Pero luego hay algunos tonos cálidos de capuchino y chocolate, muchos metálicos, bronce, que me encantan”, aclaró Kors.
Fuera de la combinación de colores, Kors se esfuerza por crear diseños sensuales y ajustados con gran comodidad. “Nunca se trata solo de usar algo ceñido porque para mí es comodidad para todo. Pero definitivamente también se trata de mostrar el cuerpo. Por eso hoy verás modelos de todas las edades y tamaños, lo que lo hace interesante para mí”.
