María Schutz, la fundadora de Mariah Moda Social, marca que destina el 100% de sus ventas a ONG e instituciones solidarias, no se detiene. Visitó la parroquia San Antonio de Padua en la localidad bonaerense de San Antonio de Areco para comenzar a tender redes de ayuda social en ese pueblo tan pintoresco, ubicado a menos de 100 kilómetros de Buenos Aires.
Embajadora Solidaria de la Cámara Argentina de la Moda, no solo dialogó con los encargados de la parroquia, sino que además acordó colaborar con la Cooperadora para la Nutrición Infantil (CONIN) Areco. Para eso, se reunió con Dolores Naon, (presidenta de la comisión directiva de CONIN), Fabiana Saravi (encargada de los talleres de CONIN y vocal de la Asociación Padre Stakelum), María Largos Marmol (encargada de relaciones externas), Francisca Maino (coordinadora Centro CONIN) y Sofía Bergadá (estimuladora Centro CONIN). “Además de colaborar con el comedor, estoy organizando para que una maestra de costura les dé clases a las mamás de los chicos con desnutrición que llegan hasta el centro y puedan tomar esto como una salida laboral“, comentó Schutz.
Además de la acción con CONIN, junto con el padre Juan Carlos analizaron el contexto de la producción de moda religiosa y la relación entre el arte y la imaginación católica. Juan Carlos es diseñador de su propia ropa: creó los trajes de los Reyes Magos para el pesebre del pueblo y hasta su propia capa para las misas de funerales añadiendo un sol bordado en dorado sobre la tela negra para hacer referencia a la luz al final del camino. Además, restauró numerosas piezas antiguas de la Iglesia, entre otros bordados.
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“Reflexionamos acerca de la influencia de las primeras vestimentas religiosas en las túnicas de Mariah Moda Social, la búsqueda de la fe y la tendencia y la diferencia entre lo sagrado y lo profano”, destacó Schutz; y agregó que el Padre “contó sobre el uso de colores, tela y modelos de prendas en las actividades religiosas y la unión entre un bien que es belleza, como el cristianismo, y una belleza que hace bien, como lo es la moda social”.
Acerca del arribo de su emprendimiento a San Antonio de Areco, Mariah sostuvo: “Este es un paso más dentro del trabajo solidario federal al que busco hacer llegar a distintos puntos del país”. Y valoró: “La moda también puede ser un puente solidario en este contexto de pandemia que profundizó las necesidades de muchas y muchos ciudadanos”. En esa línea, contó que tuvo una charla muy interesante con el párroco. “Coincidimos en que la moda no es solo una pasarela, sino un puente de solidaridad”, enfatizó.
La emprendedora lanzó su proyecto Mariah Moda Social en 2020 y se destaca porque destina el 100% de las ventas a ONG o a lugares que elijan sus clientes y clientas siempre con el mismo fin: ayudar. Quienes se acercan al atelier, charlan con Mariah, que toma las medidas para realizar las prendas de manera exclusiva y allí se define qué institución recibirá la donación. “A través de mi proyecto, busco convocar a todas las marcas y emprendedores a crear redes solidarias. Todos podemos hacer algo por el otro, más en estos momentos de tanta incertidumbre”, remarcó Schutz.
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