En un ambiente mágico, Emilia Clarke deslumbró mientras caminaba por la alfombra roja en el BFI Southbank, para la premiere británica de su última película, "Last Christmas". La actriz, que interpreta al personaje principal Kate en el filme navideño, lució un Prada hecho a medida con un escote que dejó ver hasta los abdominales.
La estrella de Game of Thrones, de 33 años, cambió su disfraz de Daenerys Targaryen por un vestido deslumbrante en el que todos los detalles suman: el escote profundísimo en forma de cerradura rodeado de pedrería, el cuello en forma de gargantilla y los volados de gasa del corpiño le dieron en conjunto una imagen ideal para el tono de la película.
El corte, el escote y el largo del vestido, que no llegaba al piso, la hicieron verse más alta. Hay que anotar todos sus trucos: para terminar de alargar su figura, completó el look con sandalias altísimas de tiras negras.
Clarke optó por una cola de caballo bien tirante y maquillaje nude con smoke eyes. Como accesorios, teniendo en cuenta que el vestido ya tiene mucha pedrería, eligió delicadas joyas de Cartier.
Pero antes de estrenar la película en Gran Bretaña, lo había hecho en Nueva York con un vestido de Valentino que también deslumbró a todos. El diseño, de la colección primavera-verano 2020, no hay manera de que pase desapercibido. De color púrpura y completamente de lentejuelas hasta el piso, tiene un corte que favorece a Emilia.
Además, los tirantes finitos y el escote bajo estiraron más su talle. Para esta ocasión, dejó el pelo suelto y complementó con aros, uñas y sandalias a tono con el vestido.
Para esta gira de prensa de la película, Emilia Clarke se puso en manos de Petra Flannery -estilista de Emma Stone y Reese Witherspoon por ejemplo- y logró tener un sello personal al vestirse.
Esta misma semana, para una conferencia de prensa especial, la actriz combinó un top rosado de un solo hombro a rayas, con pantalones naranjas y stilettos altísimos naranja claro de Christian Louboutin.
