Pocas óperas se representaron tanto como “La Traviata”. Su partitura, la riqueza de sus personajes y la vigencia de un argumento, con un personaje femenino que se niega a cumplir los mandatos sociales de su tiempo la convirtieron en un clásico entre clásicos. Pero esta Traviata no será una más, por primera vez en el Teatro Colón se verá una producción de Franco Zeffirelli que llega desde la mismísima Ópera de Roma.
Se estrenó en Venecia, en la temporada de 1853 del Teatro La Fenice, y, aunque parezca extraño, fue un fracaso. Sin embargo, no pasó mucho tiempo para que su suerte cambiara y tanto público como crítica se rindieran a su belleza y ante la historia de Violetta Valéry, famosa cortesana que se rinde al amor verdadero al tiempo que contrae tuberculosis, la mortal enfermedad que hacía estragos desde la antigüedad pero que con la Revolución Industrial se multiplicó.
Para el público del Colón, La Traviata es una de las citas más esperadas. La primera vez que se representó fue en 1910 y en sus múltiples regresos incluyó desde a Mario del Mónaco en 1949 en el rol de Alfredo y a "la stupenda" Joan Sutherland como Violetta. Ahora, se esperaba su vuelta al escenario del Colón tras una larga espera desde la temporada 1999 y con una puesta lujosa, que viene desde la Ópera de Roma y firmada por uno de los maestros de la escenografía, el director y régisseur Franzo Zefirelli, uno de los pocos maestros que aún no habían pasado por el primer coliseo argentino.
Aunque no estará presente, esta leyenda del 94 del espectáculo (director de "Romeo y Julieta", "Jesús de Nazareth" y "Callas Forever", sobre su amada María) desembarcó en el Teatro Colón y, como en La Traviata, eso merece un brindis.
Funciones: sábado a las 20 hs. y domingo 17 a las 17. La función del domingo 17 a las 17:00 horas se verá en vivo en la pantalla gigante al aire libre de Plaza Vaticano (Cerrito y Viamonte) con entrada libre y gratuita y a través dewww.teatrocolon.org.ar Entradas: desde $ 140
