"Los países de la región protegerán a los sectores más sensibles". Esto consideró Luis Pagani, presidente de Arcor, al referirse a aquellas industrias mano de obra intensiva y poco competitivas que quedarían más expuestas a la quita de aranceles. Desestimó además que el inminente acuerdo de libre comercio entre el Mercosur y la Unión Europea pueda ser calificado como "entreguista".
"El mundo va hacia una disminución cada vez mayor de los aranceles y todo deberá ser revisado por el Gobierno y las cámaras. Sobre todo lo que tiene que ver con sectores sensibles. No lo veo como entreguismo", dijo a la prensa, luego de exponer en el Foro de Negocios del MC11, el evento de la OMC en la Argentina.
"Todavía hay que ver qué dicen los socios (por los otros países del Mercosur). Hay un acuerdo marco que se va a implementar en un tiempo determinado", agregó Pagani, entre cauteloso y expectante.
Arcor, la multinacional alimenticia, exporta a Europa y otros destinos. Los países del Mercosur quieren que el sector alimentario avance rápidamente hacia un esquema de aranceles nulos, aunque los negociadores europeos impondrán cupos. En cambio Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay quieren que las industrias menos competitivas (la automotriz y la autopartista, por ejemplo) comiencen a competir en una década o más.
Al respecto, Jaime Campos, presidente de la Asociación Empresaria Argentina (AEA), se mostró confiado en que la negociación sea beneficiosa. "El Gobierno tiene una visión pro empresaria. La apertura es positiva, aunque hay que ver la letra fina", consideró.
El foro de negocios del MC11 organizado por el Ministerio de Producción y la Cámara de Comercio Internacional (ICC, sus siglas en inglés) congregó a más de 1000 empresarios de distintos países. La Camara emitió una declaración en defensa del sistema de reglas comerciales de la OMC y de la apertura y en contra del proteccionismo, en momentos en que Estados Unidos avanza hacia una mayor cerrazón comercial.
Competencia
En ese sentido, el ministro de Producción, Francisco Cabrera, dijo que las reformas impositivas y laborales que busca implementar el Gobierno tienen como objetivo mejorar la competitividad de las empresas, en un contexto de mayor apertura comercial.
Al respecto, Pagani ponderó la intención de reducir los impuestos a los Ingresos Brutos provinciales, aunque consideró que el impuesto a las bebidas azucaradas que busca introducir el Gobierno obedece a una "cuestión tributaria", es decir, a recaudar más.
