Con referencias a la "herencia recibida", pero también con autocrítica por la "impericia de gestión", el ministro de Hacienda, Hernán Lacunza, defendió en comisión ante diputados de la oposición el proyecto de ley del Presupuesto 2020, que contempla un dólar promedio de $67, inflación del 34% y crecimiento del 1% sobre el PBI.
// Hernán Lacunza defenderá este lunes en el Congreso el proyecto del Presupuesto 2020
En una exposición de una hora, donde no hubo preguntas, el ministro de Hacienda primero hizo un balance de los casi cuatro años de gestión de Cambiemos: "Hubo una combinación de herencia recibida, factores externos y falta de coordinación del programa. No voy a entrar en juicio de valor sobre la herencia, pero sí mencionar que en los anteriores cuatro años había alta inflación, pero no generación de empleo. También un agudo desequilibro fiscal y desequilibrio comercial latente con restricciones".
Aunque de manera indirecta, Hernán Lacunza relacionó la "herencia recibida" con la deuda tomada por el gobierno de Mauricio Macri: "Empezamos con un 'triángulo de las bermudas': atraso cambiario, tarifas rezagadas y alta inflación. En el primer año fue muy difícil subir las tarifas y el tipo de cambio y a la vez crecer. El gradualismo quizás no haya sido una elección sino una imposición de la realidad. El gradualismo fue financiado con deuda en el mercado externo".
El ministro de Hacienda luego recordó que la actividad económica había empezado a "crecer al 4% a principios de 2018, pero se detuvo por un shock externo en abril, donde el país sufrió una crisis financiera y cambiaria, que se trasladó a la economía real". Dos meses más tarde, el presidente Macri anunció un acuerdo con el Fondo Monetario Interncional (FMI) que terminó siendo por u$s57.000 millones.
"La deuda es la suma de los déficits a lo largo de los años. La deuda subió 12% por el reconocimiento de los holdouts. Primero emitimos deuda para financiar el déficit y ahora emitimos para renovar deuda. El corte del crédito voluntario nos llevó a acordar con el FMI un préstamo del tipo stand-by", describió Lacunza sobre el espiral de crecimiento de la deuda de la Argentina.
"La deuda actual es del 85% sobre el PBI, pero el 35% está en manos del sector público. No tenemos un problema de solvencia sino de liquidez motivado por la incertidumbre electoral", precisó el ministro.
De todas maneras, según el proyecto de ley de presupuesto, el Gobierno estima que 2019 terminará con equilibrio fiscal y que eso se mantedrá en 2020. "Por eso, en los próximos años, no aumentará la deuda", insistió.
En ese escenario, con superávit fiscal, al que se agregaría un superávit comercial de u$s18.000 millones, Lacunza consideró posible la estabilidad cambiaria en 2020: "Estimamos un tipo de cambio de $67 promedio y de $75 en diciembre del próximo año. No hay espacio ni necesidad para tener un tipo de cambio más alto, una vez superada la incertidumbre electoral, si también resolvemos el problema de liquidez de la deuda".