Simone Biles patentó el salto más dificil de la rama femenina de la gimnasia artistica, el complicado Yurchenko Double Pike, que hizo en la clasificación del Campeonato Mundial de Amberes, el sexto para ella en su carrera.
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La maniobra fue bautizada como Biles II, la cual ingresó al sistema de puntuación con la nota más alta de la historia: 6.4 puntos y superó al “Produnova”, que realizó Yelena Serguéyevna Produnova, también llamada el “salto de la muerte”.
Qué es el Yurchenko Double Pike
El Yurchenko Double Pike consiste en que la atleta llegue a la mesa de salto realizando una voltereta de espalda y luego haga un doble giro con las piernas estiradas.
¿En qué consiste el Biles II?
Es una versión más complicada del Yurchenko original, que hizo por primera vez la rusa Natalia Yurchenko en 1982, cuando entró al potro con una pirueta de espalda y realizó luego un giro con las piernas estiradas.
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La estadounidense dio dos mortales carpados (con las piernas estiradas y pegadas al torso) antes de aterrizar, algo de mayor dificultad, porque exige mucha potencia y velocidad para poder impulsarse lo más alto posible (alrededor de dos metros aproximadamente) y girar muy rápido.
Qué puntaje le dieron a Simone Biles en Amberes
Este domingo, Simone Biles recibió una puntuación de 15,266 (el ideal para un ejecución perfecta es de 16,400). Los jueces la penalizaron porque en el aterrizaje dio un paso hacia atrás y le quitaron también 0,5 porque la estadounidense pidió que su entrenador estuviera cerca de la colchoneta, por una cuestión de seguridad.
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El Biles II es el segundo salto con el nombre de la estadounidense en el código de puntuación de la FIG. En 2018, Simone patentó el Biles I, otra versión del Yurchenko, en el que realiza medio giro sobre el potro y un doble giro frontal.
El colapso mental de Simone Biles en Tokio, que la obligó a abandonar la actividad
Casi dos años atrás, Biles fue una de las grandes protagonistas de los Juegos de Tokio, donde el mundo del deporte esperaba que repitiera su colosal actuación de Rio 2016, donde cosechó cuatro oros y un bronce.
Sometida a una enorme presión, la participación de Biles en Tokio dio un giro dramático e inesperado que comenzó con una serie de errores inusuales durante las primeras rondas de clasificación.
El bloqueo de Biles, que confesó sentir “el peso del mundo sobre mis hombros”, la llevó a renunciar a última hora a la mayoría de pruebas apelando a su salud mental.
La estadounidense, que había logrado una medalla de plata en el concurso general por equipos, fue capaz de volver a la competición en la última jornada y se adjudicó un bronce en la barra de equilibrio.
Además de la presión de ser un ícono global del deporte, Biles ha atravesado por dolorosos episodios en su carrera y su vida personal.
Durante su infancia la pequeña Simone, que descubrió la gimnasia a los seis años por casualidad durante una excursión escolar, y sus tres hermanos tuvieron que ser enviados a un centro de acogida ante los problemas de alcohol y drogas de su madre.
Cuando ya era una figura, la estadounidense estuvo entre las decenas de gimnastas de élite que sufrieron abusos sexuales a manos del médico del equipo nacional Larry Nassar, condenado a décadas de cárcel por estos delitos.
