A la espera de que se habiliten las prácticas grupales, Boca se rearma para la reanudación de la Copa Libertadores. Luego de asegurar la continuidad de dos figuras como Carlos Tevez y Mauro Zárate, el cuerpo técnico y la Secretaría de Fútbol ahora analizan los refuerzos.
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Cuando se reanuden las prácticas, Miguel Russo se encontrará al menos con una cara nueva: la de Gonzalo Maroni, quien en la última temporada se desempeñó en Sampdoria.
Tras su paso por Talleres, el mediocampista ofensivo de 21 años se fue a préstamo al fútbol italiano con una opción de compra que rondaba los 11 millones de euros. En medio de la crisis desatada por la pandemia del coronavirus, el conjunto genovés decidió que no hará uso de esta cláusula.
El pase pertenece a Boca. De esta manera el futbolista surgido en Instituto regresará a la Argentina con la idea de ponerse la camiseta azul y oro. Quien tendrá la decisión final sobre su futuro es Russo, que pretende verlo en acción antes de definir si lo mantiene en el plantel o si lo dan a préstamo a otro equipo.
A la espera de la respuesta de Mauricio Isla
En los próximos días, el lateral de la Selección de Chile responderá la oferta del Xeneize. En los últimos días, Isla le hizo un guiño al conjunto de la Ribera al señalar que "está a la altura de Real Madrid, Barcelona y Juventus", aunque todavía no definió su futuro.
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El defensor de 32 años se encuentra con el pase en su poder luego de que finalizara su contrato con Fenerbahçe de Turquía y define si vuelve a jugar a Sudamérica o si se va a Europa, donde también tiene pretendientes.
