Sin dudas que aquel equipo de Gimnasia y Esgrima La Plata fue uno de los que mejor jugó al fútbol en el ascenso. Dirigido por Nito Veiga, tenía jugadores capaces de defender a muerte un resultado, como de darle un a lección de fútbol y toques a cualquiera.
Hoy se cumplen 35 años de aquella tarde donde el Lobo le sacó brillo a la pelota para lograr el ascenso a primera división: dejó en el camino a un Racing que vivía el peor momento de su historia.
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El Lobo, luego de una campaña destacada, había logrado superar a Argentino de Rosario en cuartos de final y a Defensores de Belgrano en semifinales. Ese equipo contaba con el talento del Charly Carrio, que era el cerebro del equipo de Nito Veiga.
En el fondo lo tenía a Osvaldo Ingrao, que se caracterizaba por pegarle fuerte a la pelota. De hecho el marcador central fue el goleador de Gimnasia con 13 gritos. Y como delanteros contaba con Gabriel Pedrazzi y a Angel "Bocha" Flores, quienes en el torneo hicieron 10 y 8 goles respectivamente.
La primera final se jugó en Avellaneda el 27 de diciembre de 1984. Gimnasia le ganó 3 a 1 a Racing, que tenía en el equipo a Miguel Brindisi y como técnico a Agustín Mario Cejas.
La revancha se jugó el 30 de diciembre. Y el Bosque se vistió de fiesta para disfrutar del ascenso tripero. El partido fue televisado en vivo por Canal 13. La transmisión tuvo el relato de Carlos Asnaghi y a un joven Marcelo Tinelli trabajando en el campo de juego.
Si alguien esperaba la reacción de Racing estaba equivocado. Porque el Lobo le dio un lindo baile a la Academia. Terminó siendo 4 a 2 para terminar de confirmar el regreso a primera.
La fiesta fue interminable en 60 y 118. Los goles del campeón fueron de Flores, Pedrazzi y Carrió en dos oportunidades.
Ya pasaron 35 años de aquel partido histórico. Será recordado como el día que Gimnasia subió a primera y dejó a Racing en la B.