Leonardo Ponzio ya puede respirar tranquilo. El Juzgado de lo Penal número 7 de Valencia lo absolvió, junto a todos los demas futbolistas del Zaragoza y el Levante, del presunto arreglo del partido disputado en 2011 entre ambos equipos, en la última jornada de Liga y en el que los aragoneses lograron evitar el descenso de categoría.
Sin embargo, dos directivos del Zaragoza fueron condenados por falsedad en un documento presentado. El expropietario, Agapito Iglesias y el consejero Francisco Javier Porquera, fueron condenador a un año y tres meses de prisión.
La causa llegó a juicio después de que la Audiencia de Valencia acordara reabrir una investigación al considerar que existían indicios de que nueve jugadores, el técnico y el director deportivo del Zaragoza percibieron los días previos al partido cerca de un millón de euros, dinero que habría terminado en manos de los jugadores del Levante. El Zaragoza necesitaba ganar aquel encuentro para garantizarse la permanencia en Primera División y con ello propició el descenso del Deportivo de La Coruña.
Además Ponzio, también habían sido juzgados los argentino Nicolás Bertolo y Leo Franco. También participaron del proceso jugadores de renombre internacional como Gabi Hernández, Ander Herrera y Juanfran, entre otros.
Ponzio era capitán del Zaragoza en 2011 y según la Fiscalía de Anticorrupción, era uno de los jugadores que participaron activamente de la operación.
