Ante la inminente salida de Eduardo Coudet de Racing, Jorge Sampaoli se convirtió en la gran obsesión para la dirigencia de la Academia. Diego Milito, secretario técnico de la institución, viajó a Brasil para tener una reunión con el actual entrenador del Santos.
Sampaoli aceptó recibir la visita de Milito, algo que fue interpretado en Avellaneda como una fuerte señal de que se podrá avanzar en la negociación. De todos modos las tratativas recién empiezan: el exentrenador de la Selección argentina tiene un contrato muy alto en Brasil y no será sencillo igualarlo.
Santos se encuentra en la tercera posición del Brasileirao y tiene prácticamente asegurada su participación en la Copa Libertadores del año próximo, luego de una meritoria campaña que realizó sin refuerzos.
La partida de Coudet es cuestión de horas. En breve se haría oficial su salida a fin de año: todo indica que el Chacho se hará cargo del Inter de Porto Alegre. En los últimos días, el defensor argentino Víctor Cuesta confirmó ante los medios brasileños la llegada del Chacho, tal vez desconociendo que el DT todavía no lo hizo oficial en la Argentina.
Pero la llegada de Sampaoli tampoco es imposible. La renuncia del principal sostén en la institución paulista, Paulo Autuori, superintendente de fútbol del club "de Pelé", podría desencadenar en una salida prematura del entrenador argentino.
Ante este panorama es que Racing se "tiró a la pileta" por Sampaoli y por eso Milito viajó a Brasil para hablar con él. La parte económica será fundamental en la negociación. Se vienen días determinantes: la Academia, mientras tanto, se anima a soñar.
