La millonaria y rara boda de Sergio Ramos: sin celulares, sin hijos y con una contraseña para entrar

Tiene perfil de boda real. Desde hace meses se viene hablando del enlace de Sergio Ramos y Pilar Rubio. La pareja, que lleva ya seis años de convivencia y que tiene tres hijos, se mostró durante años reticente a pasar por el altar, pero ahora todo ha cambiado. La cita es el próximo sábado en la catedral de Sevilla, en donde habrá más de 400 invitados.

La novia admitió que el número de concurrentes se le ha ido de las manos y es por eso que decidieron hacer algunas cosas para tratar de que sea lo más exclusiva posible. Todos los invitados han recibido una caja negra con un libro en su interior, en cuya portada aparece el dibujo de un unicornio rojo con tres estrellas. El volumen contiene desplegables con fotografías de los lugares más emblemáticos de la ciudad hispalense como la catedral, la Giralda o la Maestranza, así como una serie de instrucciones sobre la ceremonia y, en especial, la fiesta posterior. Ese animal mitológico es una especie de contraseña para evitar colados.

Los novios también le han pedido a los invitados que no lleven teléfonos celulares y que los niños solo acudan a la iglesia, no a la fiesta posterior.

Además, hay un estricto código de etiqueta. Los hombres deben vestir de chaqué y las mujeres evitar algunos colores como blanco, rosa, rojo, naranja y verde. El escenario de la celebración será La Alegría SR4, la finca propiedad del futbolista situada en la localidad sevillana de Bollullos de la Mitación. En ella, el capitán del Real Madrid desarrolla una de sus grandes pasiones: la cría de caballos. Una actividad que le reporta pérdidas pero que le ha proporcionado premios por la calidad de algunos de sus ejemplares.

Pese al escenario catedralicio elegido y otros detalles, la boda de Sergio Ramos y Pilar Rubio será diferente. A los novios les une su pasión por la música. La novia es una declarada rockera y sueña con una actuación de altura. Se habla de que han intentado contratar a AC/DC pero ellos ni confirman ni desmienten.

Se espera la presencia de muchos compañeros de equipo del jugador y de rostros conocidos. Además, Ramos y su hermano René son socios del cantante Marc Anthony a través de la empresa Magnus Sports, por lo que el estadounidense de origen puertorriqueño podría también ser parte de la boda.

Son días de preparativos y de nervios como en toda boda, pero el novio, además, los está viviendo con especial tensión por su futuro profesional. Con 33 años cumplidos y atrapado en la incertidumbre de una aventura empresarial inmobiliaria de envergadura que se tambalea, el capitán del Real Madrid sopesó una sustanciosa oferta de un equipo chino y decidió trasladarla al presidente del club, Florentino Pérez, que no aceptó la oferta.

En vista de la situación, el jugador no tuvo más remedio que hablar ante los medios de comunicación para declarar que su sueño siempre ha sido terminar su carrera deportiva en el Real Madrid. El futbolista explicó que no había rechazado la propuesta, sino que había recabado detalles sobre lo necesario para un hipotético traspaso.

Hace dos años, Ramos vivió una de sus mayores expansiones como empresario,especialmente en el sector inmobiliario. El futbolista entró en el consejo de administración de una de las inmobiliarias de su padre, José María: Desarrollos Inmobiliarios Los Berrocales, con 13 millones y medio de capital y sede en la madrileña calle de Serrano. Con su propia promotora urbanística en Madrid, parecía que la faceta empresarial del futbolista iba al alza.

Sin embargo, los problemas han llegado para el clan Ramos. El proyecto de la promotora para construir 22.000 viviendas en Vallecas fue tumbado por el Ayuntamiento de Manuela Carmena. El Consistorio redujo la edificabilidad y Desarrollos Inmobiliarios Los Berrocales se ha encontrado con su inversión millonaria paralizada. Eso ha supuesto alguna tensión de tesorería para el futbolista que vio en la aventura de China la posibilidad de aliviar la presión. Algunas informaciones apuntan a que la sociedad ha perdido en esta operación más de 60 millones.

Pese a esto, nada impedirá que Sergio Ramos y Pilar Rubio se gasten una fortuna en su boda del sábado. Hubo un tiempo en que a la pareja se les conocía como los Beckham españoles. Y, si de exposición mediática se trata, ellos dan la talla.