Real Madrid pisó fuerte en el Wanda Metropolitano y se quedó con una nueva edición del derby de la ciudad. Fue 3 a 1 al Atlético de Madrid en un partido cargado de polémicas y por un VAR que generó más dudas que certezas.
El Merengue se puso en ventaja a los 16 minutos del primer tiempo con un verdadero golazo del brasileño Casemiro, que conectó de tijera un violento disparo que se metió dentro del arco de Jan Oblak.
A los 25, el Aleti llegó a la igualdad por intermedio de Antoine Griezmann. Fue una gran definición luego de un muy buen pase del argentino Ángel Correa, de correcto desempeño.
Pero los árbitros del encuentro hicieron una mala lectura del VAR cuando en el minuto 42 le dieron un polémico penal al Real Madrid. La falta de José María Giménez a Vinicius había sido fuera del área. Sergio Ramos castigó con un derechazo letal.
La segunda mitad del partido comenzó con polémica: otra vez con el VAR perjudicaron al Atlético de Simeone. Álvaro Morata había convertido un gol espectacular, pero se lo anularon por offside. Las repeticiones muestran que estaba en la misma línea del último defensor madridista.
Gareth Bale sentenció la historia a los 74 minutos, con un disparo de zurda bien cruzado.
Real Madrid, que empató 1-1 con Barcelona el miércoles pasado en la primera semifinal de la Copa del Rey, ahora es el escolta del equipo Culé con 45 puntos. Quedó a cinco unidades del líder.
El equipo de Simeone quedó con 44 puntos.
