Perdió en la ida. Perdió en la vuelta. Pero San Lorenzo está en octavos de final de la Copa Sudamericana. La explicación no es futbolística sino administrativa: Deportes Temuco incluyó mal un jugador en la ida, y lo que era triunfo 2-1 se le dio vuelta a 0-3 por el reglamento.
El Ciclón tuvo un flojísimo partido en Chile, y se mantuvo a salvo gracias a la gran actuación de su arquero Nicolás Navarro. El uno fue la gran figura del partido, sacando todo hasta donde pudo, cuando en el descuento Matías Donoso logró el único gol del partido.
El equipo Claudio Biaggio recién pateó al arco sobre el final del encuentro, en los segundos 45 minutos, y sus jugadores reconocieron el mal momento que atraviesa el equipo.
Sobre el final del encuentro hubo un incidente entre los hinchas del equipo trasandino y el banco de suplentes visitante, y como producto Gonzalo Borean (preparador físico) terminó con un corte en su cara luego de recibir el impacto de un proyectil.
Temuco ganó 2-1 en la ida y 1-0 la vuelta, pero por un error administrativo (Jonathan Requena fue anotado en el equipo chileno indebidamente, ya que había formado parte del plantel de Defensa y Justicia en la primera ronda del torneo) se quedó sin clasificar. Los méritos que hizo en la cancha no le alcanzaron por violar el reglamento, dándole la chance al Cuervo de avanzar sin mercerlo.
Ahora, San Lorenzo se medirá en octavos de final con Nacional de Montevideo, que superó a 1-0 en el global a Sol de América de Paraguay.
